Premios al Deporte 2019

Un ambiente muy familiar y entrañable volvió a vivirse en la Gala de los Premios al Deporte ‘Villa de Cuéllar’, que este año cambió su ubicación a la Biblioteca Municipal, mas no su cometido: reconocer el esfuerzo y labor de los mejores deportistas de Cuéllar y comarca. Una sala a rebosar hizo sentir a los premiados el calor de la vecindad, orgullosa de sus hazañas en cada competición, a las que siempre llevan el nombre de Cuéllar como amuleto.

Antes de empezar con la entrega de premios, Ángel Carlos Hernando, del Club Atlético Cuéllar, presentó las dos pruebas más destacadas en cuanto a atletismo en la villa: la San Silvestre y la carrera de las Murallas. La primera contará con novedades el 31 de diciembre, ya que se va a añadir una categoría más para los niños de 5 y 6 años, y esperan que sea el mismo éxito de convocatoria que en las últimas ediciones, con casi 400 corredores inscritos.

Los primeros en recibir su galardón fueron los elegidos para las menciones especiales. Segundo Velasco y sus perros de competición fueron los primeros protagonistas, sobre todo Hush de los Cuellaranos, uno de los animales que más alegrías le ha dado a Velasco. Quiso compartir algunas pinceladas de este deporte tan minoritario y compartir el orgullo de que “de los cuellaranos” suene por toda la geografía, allá donde compite.

La siguiente mención fue para José Criado Senovilla, director de la ONGD Fundación FDI Fomento del Desarrollo y la Integración, y su labor uniendo deporte y personas discapacitadas. Emocionado por el vídeo de sus amigos felicitándolo, reconoció que recibir este premio en casa es muy especial para él. La última de las menciones fue para el prestigioso Club de Pelota de Vallelado, que lleva 30 años fomentando este deporte y cosechando éxitos. No faltó a recoger el premio Carlos Baeza, campeón de pala e imparable junto a su equipo.

Los patrocinios también tienen premio en esta gala y esta vez se quiso reconocer la labor de Viveros Herol. Su presidente y patrocinador, Julián Mateo, regente de la empresa junto a su hermana, transmitieron el orgullo de patrocinar y apoyar desde hace 25 años al Balonmano Nava y sus valores. Anunció que espera poder instaurar la Escuela de Balonmano en Cuéllar el próximo curso, para continuar con esos valores que fundamentan este deporte, algo que seguro tendrá muy buena acogida.

La Peña Ciclista Pipe Gómez también contó con premio, el de la promoción deportiva de 2019, por su Trofeo Escuelas de Ciclismo que se desarrolla cada año por las calles de San Gil. Luis Senovilla, socio de la peña, anunció ya las fechas para las competiciones de este 2020, pero sobre todo hizo un llamamiento a la colaboración; los socios siguen siendo los mismos que hace años y cada vez cuesta más organizar, aunque encuentren apoyos. Sin su inestimable iniciativa, el ciclismo no tendría tanta importancia en la villa.

Los mejores deportistas dieron una lección de esfuerzo y constancia al recoger su premio. Hugo y Alain González Montalvillo, campeones de Kick Boxing, agradecieron a familia, amigos y vecinos todo el apoyo que los anima a seguir esforzándose. Ayer mismo ya seguían su temporada de competiciones en Oviedo, impulsados por este galardón. Por su parte, Ángela García Sancho, imparable en el mundo del atletismo desde hace varios años y sin límites en la actualidad, también se mostró ilusionada por este premio que realza en gran medida una carrera que no ha parado desde los cuatro años. Su discurso de agradecimiento también dejó espacio a la reivindicación, y aprovechando la presencia de los concejales y alcalde, que entregaron algunos premios, pidió de nuevo las nuevas pistas de atletismo para Cuéllar. Además, agradeció la labor del Club Atletismo Cuéllar por sentar las bases de este deporte desde edades tempranas.

El último premiado de la tarde fue José Manuel Escudero Montero, que recibió el que puede ser el galardón más simbólico y emotivo, el premio al Deporte Javier Rodríguez Sanz, en memoria del cuellarano que tanto hizo por el deporte local. Un vídeo muy simbólico con palabras de su hija desde el Machu Pichu emocionó aún más a José Manuel, que tuvo que encestar para conseguir su galardón. El premiado reconoció la labor del presidente del Club Baloncesto Cuéllar y muy especialmente la de los “incansables e insustituibles” monitores, que continúan con el legado de este deporte tan querido en la localidad y por el que se trabaja a diario.