Los jugadores de la Selección Rodrigo Hernández y Sergio Ramos realizan varios ejercicios en el entrenamiento.
Los jugadores de la Selección Rodrigo Hernández y Sergio Ramos realizan varios ejercicios en el entrenamiento. / efe

La selección española de fútbol buscará hoy (20.45 horas/La1) tres puntos ‘obligados’ en la fase de clasificación para la Eurocopa 2020 cuando visite a la modesta Malta, el rival más asequible en teoría con el que se ha encontrado Luis Enrique Martínez desde su llegada al banquillo y frente al que tiene también la misión de recuperar puntería ante una portería defendida por el hijo de John Bonello, el titular en el recordado 12-1 de 1983.

España cumplió en su estreno en el camino hacia el torneo continental. El pasado sábado, en Mestalla, se deshizo de Noruega, con más problemas de los previstos y de los que el partido sugirió, porque nunca hubo una renta en el marcador excesivamente cómoda y eso provocó que su oponente soñase siempre con arañar algo positivo.

Las sensaciones que ofreció la ‘Roja’ fueron positivas y únicamente quedaron empañadas en parte por la falta de acierto en los metros finales. La tricampeona de Europa pisó mucho y con claridad el área rival y gozó de muchas ocasiones, pero la falta de acierto le condenó a un mayor sufrimiento del esperado.

“Ha sido un partido muy completo, generando muchísimas ocasiones clarísimas. La dificultad está en generar las ocasiones y meterlas depende de la calidad”, admitió Luis Enrique, que sabe que duelo contra Malta es una buena oportunidad para recuperar la confianza de cara al gol, aunque en el panorama europeo, goleadas sonoras, y más a domicilio, se van convirtiendo en más extrañas.

Pese a que el gol fue lo que faltó el sábado, no parece que el técnico asturiano vaya a retocar en exceso, ni esa línea, ni el resto. El tiempo que tiene para trabajar con los internacionales no es demasiado y dentro de una clasificación más comprimida en el tiempo se antoja improbable muchos cambios en el once.

Arriba, el de Gijón se deshizo en elogios tanto en Álvaro Morata, pese a sus buenas ocasiones desperdiciadas, como en Rodrigo Moreno, autor del 1-0, y ambos se perfilan de nuevo titulares. El talante del duelo podría incluir alguna modificación en el tridente de arriba, pero las condiciones de Asensio le dan ventaja sobre otras opciones como las de Iker Muniain o Sergio Canales.

Variaciones

En el centro del campo también podría haber alguna variación para refrescar una zona que tuvo mucha pelea en Mestalla con los aguerridos centrocampistas noruegos, aunque los tres que jugaron (Busquets, Ceballos y Parejo) parecen ideales para manejar este tipo de partidos, aunque sólo el azulgrana jugó el anterior partido entero.

Atrás no se esperan cambios salvo que Luis Enrique quiera tener energía renovada. Jordi Alba y Jesús Navas dieron mucha profundidad y su velocidad, calidad en el centro y desborde son cualidades necesarias ante un rival que se encierre, mientras que es buen partido para seguir asentando a Íñigo Martínez como compañero en el centro de Sergio Ramos.

La selección española tiene claro el partido que le espera en el estadio Ta’ Qali. El combinado maltés, muy arraigado en la historia del fútbol nacional por aquel recordado 12-1 que dio el billete a la Eurcopa de 1984, se esmerará en incomodar todo lo posible a los de Luis Enrique que, salvo sorpresa, serán dueños y señores del balón y que tendrán que tirar de paciencia como ante Noruega para abrir el marcador lo antes posible. Desde aquel mítico partido del 21 de diciembre de 1983 en el Benito Villamarín, las dos selecciones sólo se han visto las caras en cuatro ocasiones más, la última hace más de dos décadas, con victoria de España por 4-0 en el Rico Pérez en el año 1997.