Victorino Martín junto a José Miguel Gil y Pablo Pastor, durante la 298 Tertulia Taurina. / EL ADELANTADO

La Casona de San Martín acogió a un elevado número de aficionados asistentes a la 298 Tertulia Taurina de Segovia, cuyo encuentro contó con la presencia del ganadero de bravo Victorino Martín García, hijo de quién fuera ilustre y famoso personaje dentro del mundo taurino, fallecido hace relativamente poco.

Victorino hijo repetía esta experiencia de constituirse en invitado especial de la Tertulia Taurina de Segovia, en la cual su insigne padre también lo fue en dos ocasiones y ambos lo fueron igualmente como conferenciantes del ciclo taurino-cultural de la peña ‘El Espontáneo', concretamente en el primer ciclo celebrado en 1985, el cartel de conferenciantes estuvo formado por el maestro Domingo Ortega, el referido Victorino Martín, el presidente de la plaza de de Las Ventas, Luis Espada, el crítico taurino Rafael Campos de España y el profesor de la escuela taurina de Madrid, José de la Cal, siendo presentador-moderador quién les informa.

Tras el excelente cocido servido esmeradamente por La Casona de San Martín, se pasó al habitual coloquio, en el cual Victorino Martín expuso parecidas cuestiones a las declaradas en el Senado el pasado día 22.

Previamente, este informador hizo una presentación del invitado especial de quién manifestó que, hoy por hoy, el ganadero heredero del gran Victorino es una figura de relieve y de máxima solvencia dentro del mundo taurino: “Fue novillero, es veterinario, ganadero de bravo, comentarista taurino de televisión y presidente de la Fundación de Toro de Lidia. Su cúmulo de conocimientos básicos sobre el toro de lidia son vastos, fieles y de una contundencia irrebatible. Es titular de las ganaderías de Victorino Martín y los famosos «patas blancas»”.

—“Para la presente temporada taurina tengo diez y seis corridas de toros ya contratadas y varias novilladas de utreros de los ‘patas blancas'. Este hierro me está convenciendo cada vez más, esperando su refrendo determinante esta misma temporada. Iremos a lidiar a Madrid tres corridas, una en la feria de Otoño, Sevilla, Valencia, Vista Alegre, tres plazas francesas, Valladolid y otras. Lo nuestro mantiene íntegramente el encaste Saltillo. No hemos tocado la pureza de su sangre para nada. Simplemente cuidar bien el ganado y seleccionar esmeradamente.

»Efectivamente, la primera corrida de toros que lidió mi padre fue en 1966 en Calasparra, con el hierro aún de Albaserrada, y el cartel estuvo formado por los segovianos Josechu Pérez de Mendoza y Andrés Hernando y venezolano Efraín Girón. Fue un éxito ganadero y artístico.

»Mi vinculación familiar segoviana es muy profunda e intensa. Mi madre nació en Segovia y su padre en Túrégano; mi mujer Pilar Canto, de origen tureganense, nació en Segovia, su padre en Navas de San Antonio y su abuela en Zarzuela del Monte. Hemos lidiado en plazas segovianas tanto novillos al principio como una excelente novillada en Segovia capital, como corridas de toros en Segovia, Cantalejo y El Espinar.

»Mi faceta de apoderado de toreros la llevé junto a mi padre. Fuimos con Antonio Corbacho apoderados de José Tomás. Luego mi padre y yo llevamos a Miguel Abellán, César Jiménez y Luis Bolívar y en 2000 al mexicano José Luis Angelino. En cuanto al empresariado, fui opositor a la plaza de Las Ventas gormando equipo con Simón Casas. Enrique Patón y Villar Mir. No lo logramos por escaso margen, pero sí Zaragoza, tras lo cual mi dedicación pasó a la ganadería familiar.

»Soy presidente de la Fundación Toro de Lidia, y por ese motivo intervine en el Senado dentro de la Comisión de Cultura, donde expuse razones, fundamentos, historia, patrimonio del ser del toro de lidia. “El toro es un mito necesario, es nuestra manera de entender el mundo. Es el genio íbero el que encuentra significados más profundos sobre la vida y la muerte en su relación con ese toro. La tauromaquia es el regalo cultural de España a la humanidad”.

COLOQUIO, ÓLEO Y VIAJE A SORIA
El coloquio fue fundamentado en pocas preguntas y pronunciamientos de profundo contenido por parte del invitado especial. La mesa presidencial estuvo formada por Victorino Martín, José Miguel Gil, presidente del Colegio de Veterinarios de Segovia, el pintor Lope Tablada y el presentador de la Tertulia. Nada más finalizar el encuentro, Victorino emprendió viaje a Soria donde tenía una cita en el Club soriano para recoger un trofeo junto a los de Víctor Barrios en la memoria y José Luis Palomar. Aquí, le fue entregado un óleo de Lope Tablada simbolizando las figuras de Victorino padre e hijo y un majestuoso toro con todos los argumentos básicos de Saltillo.