Fuentes, de las dificultades a estar a un paso de presidir las Cortes

Los últimos meses del dirigente y de Ciudadanos han registrado grandes alzas y retrocesos

El procurador de Ciudadanos, Luis Fuentes. / europa press

Tres meses después de que el presidente de la Junta de Castilla y León, Juan Vicente Herrera (PP), le dijera al portavoz de Cs en esta Comunidad, Luis Fuentes, que no estaba “en el mejor momento de su carrera deportiva”, el político salmantino parece haber remontado y se encuentra a un paso de ser la segunda autoridad autonómica precisamente gracias al apoyo del PP.

Los últimos cuatro meses de la política en Castilla y León han sido una ‘montaña rusa’, con subidas, bajadas, giros inesperados a izquierda y derecha, pausas para ascender, gritos de desesperación en los descensos más rápidos… Lo que está por ver es cómo acaba el ‘viaje’ para quienes se han subido en los vagones.

Hoy se cumplen justo cuatro meses de la ‘espantada’ de la expresidenta de las Cortes y exconsejera de la Junta con el PP, Silvia Clemente, para enrolarse a los pocos días como independiente en la carrera de Ciudadanos para aspirar a la Presidencia de la Junta de Castilla y León.

Las andanadas lanzadas por Clemente en el momento de su marcha contra el PP de Alfonso Fernández Mañueco, de quien dijo que carecía “de palabra” y de “capacidad” para liderar un proyecto renovador para esta Comunidad, coincidieron casi en el tiempo con el apoyo férreo que las direcciones autonómica, con Luis Fuentes al frente, y nacional de Ciudadanos dieron a la exdirigente popular.

En este punto del camino circular que le vincula al PP, Fuentes se alineó con esa crítica a lo que representaba Mañueco y, por extensión, se situó en el lugar contrario al del candidato que finalmente resultó elegido en las primarias de Ciudadanos, Francisco Igea, quien tuvo que reclamar al detectar irregularidades en una votación que inicialmente daba por vencedora a Clemente y que ha acabado en la Fiscalía de Valladolid.

Fue tras ese episodio del ‘pucherazo’ frustrado cuando, desde la Junta y el PP, arreciaron las críticas a la situación de Cs y, en concreto, sobre la tesitura en que se encontraban quienes habían apoyado a Clemente en las primarias, entre ellos Fuentes.

En sus ‘cara a cara’ durante la legislatura pasada, fueron sonadas las tortas dialécticas de Herrera hacia Fuentes, a quien reprochó varias veces su indolencia en el Parlamento hasta decirle que se dedicaba a “tocar el violón”, además de alertar de la “incoherencia” de apoyarle y criticarle a la vez, mientras que el portavoz de Cs le llegó a decir que dejaba una Comunidad con “encefalograma plano”.

Ya en la campaña, el propio líder del Partido Popular, Fernández Mañueco alertó a los votantes de la desconfianza que generaba Ciudadanos: “Lecciones de regeneración las justas, de un partido que no es capaz de organizar unas primarias, de un partido indefinido o veleta”, dijo durante uno de los debates electorales.

Semanas después, con los resultados electorales encima de la mesa y una negociación abierta entre el PP y Ciudadanos, Luis Fuentes llega a la sesión constitutiva de las Cortes de Castilla y León como el candidato de consenso de ambos partidos, con lo que se cierra un camino circular de apoyos y enfrentamientos cruzados que van a colocar al salmantino en el puesto que ocupó Clemente hasta que se marchó y abrió la puerta a que el burgalés Ángel Ibáñez rematara la legislatura.

De hecho, se da la circunstancia de que, de cristalizar los acuerdos del PP y Ciudadanos, el Ejecutivo y el Legislativo pasarán de estar dirigidos por dos burgaleses, Juan Vicente Herrera y Ángel Ibáñez, respectivamente, a que lo estén por dos salmantinos, Alfonso Fernández Mañueco (PP) y Luis Fuentes (Ciudadanos).

De hecho, se da la circunstancia de que, de cristalizar los acuerdos del PP y Ciudadanos, el Ejecutivo y el Legislativo pasarán de estar dirigidos por dos burgaleses, Juan Vicente Herrera y Ángel Ibáñez, respectivamente, a que lo estén por dos salmantinos, Alfonso Fernández Mañueco (PP) y Luis Fuentes (Ciudadanos).