Los sueños hechos pintura

El pintor Teo Sanz, natural del Lastras de Cuéllar y residente en Madrid, será homenajeado el próximo 7 de septiembre por los vecinos de su pueblo en reconocimiento a toda una vida dedicada a las artes plásticas

Teo Sanz pertenece a esa generación en la que estudiar era un privilegio. De familia dedicada a las vaquerías y a las resinas, actividad tradicional de la zona de Lastras de Cuéllar, tuvo que anteponer su forma de ganarse la vida a su gran pasión, la pintura. Ya desde pequeño Teo recuerda cómo en la escuela, él era el encargado de dibujar en la pizarra los dibujos que acompañaban los dictados.

Este autodidacta de la pintura que un día fue camarero, cerrajero y peletero, decidió dejarlo todo y dedicarse a pintar. «No tuve la oportunidad de estudiar, en mi casa éramos seis hermanos y no había dinero para los estudios, pero mis inquietudes iban más arriba, quería desarrollar mi mente con lo que sentía».

Su obra, figurativa-surrealista, trata de trasmitir sus sueños y sus vivencias en complicidad con la naturaleza. «El elemento del agua siempre está presente, es la vida. Mis composiciones son oníricas de sueño y fantasía», además de utilizar la figura de la mujer como tema principal en muchas de sus acuarelas porque «me fascina el mundo de la mujer en la fantasía. Los perfiles que salen de un abanico, por ejemplo, causar sensaciones con la cara, el perfil…me gusta unir los objetos e integrarlos a lo que es la figura». Sobre qué le inspira a Teo Sanz, este artista reconoce que el momento llega sin más, pero que “cuando haces algo que el público admira es un placer, y que la gente lo reconozca es increíble”.

Unido desde su infancia a Lastras de Cuellar, ha procurado que la actividad cultural en su pueblo no falte nunca intentando ayudar a esta pequeña localidad en lo que a temas culturales se refiere. Clases de dibujo a los más pequeños o desfiles coreografiados de disfraces, el primero de ellos “en los años 70, casi en blanco y negro” son algunas de sus aportaciones. Porque para este artista “la es muy importante, da libertad, conocimientos, te lleva donde quieras ir…Yo no tengo estudios pero siempre he intentado ir con gente más culta que yo para aprender, y es una maravilla. La cultura nunca es ir para atrás”.

Quizá por esa sed de sabiduría, y su afán por enseñar lo que le ha llevado una vida aprender, Teo Sanz, recientemente jubilado, se dedica a organizar talleres para personas mayores. “Es increíble las ganas que le ponen a todo, y lo contentos que se les ve cuando están en el centro y no en el sofá de sus casas, sólos. Iban a cerrar el centro y ahora está en el puesto número dos de la Comunidad de Madrid”.

Por todos estos motivos, los vecinos de su pueblo natal, Lastras de Cuéllar, ha decidido rendirle un sentido homenaje el próximo sábado siete de septiembre en el nuevo museo etnográfico de la localidad, donde ya cuenta con una sala de exposiciones que lleva su nombre. “No me lo esperaba, que reconozcan a alguien tan sencillo como yo, que siempre he intentado ayudar al pueblo en la cultura, es un honor grandísimo. cuando me llamaron fue el día más feliz de mi vida”.