Samuel Sánchez vuelve a dar una lección bajando

Mikel Landa cede en Aia y Kelderman es el nuevo líder con Henao como principal rival

Samuel Sánchez (BMC) se impuso ayer en la cuarta etapa de la Vuelta al País Vasco, disputada entre Lesaka y Orio sobre 165 kilómetros, al lanzarse en el descenso hacia Orio tras el último paso por los muros de Aia mientras que Mikel Landa se dejó 8 segundos y el maillot de líder, ahora en posesión de Wilco Kelderman (Lotto-Jumbo).

El doble paso final por el Alto de Aia (2ª), con la última ascensión por la vertiente más dura y a 13,1 kilómetros de la meta, marcó una etapa pasada por agua que no fue decisiva pero que dejó espectáculo y cambios en la general provisional, pues Landa se quedó cortado en Aia y, tras reengancharse, el ataque de Sánchez y el estirón que provocó le condenaron.

Ahora Kelderman es líder con cuatro segundos de ventaja sobre Sergio Luis Henao (Sky), siete segundos sobre el propio Landa y ocho sobre ‘Samu’ Sánchez, que se aúpa a la cuarta posición justo por delante de Alberto Contador (Tinkoff), a 10.

A falta de las dos últimas etapas, con la subida a Arrate y la crono final, la clasificación está en un puño y más tras esta etapa en la que la lluvia caída en el último paso por Aia, lleno de gente con paraguas animando, y hasta la meta, no hizo más que dar más heroicidad a la gesta del campeón olímpico español. Sánchez aprovechó en una zona que picaba hacia arriba un tímido ataque de Contador para darle continuidad e irse en solitario.

El resto de favoritos le tenía a tiro, pero el asturiano no se dejó cazar, tiró en solitario como un jabato sin mirar hacia atrás hasta que ya, a 50 metros, se giró para comprobar que había hecho daño y que el triunfo era suyo. Además, se metió de lleno en la lucha por la general, ya que demostró tener buenas piernas en Aia, siempre en un segundo plano en el que está cómodo, y en Arrate puede tener su momento.

De todos modos, el más valiente de los grandes gallos de esta ‘Itzulia’ fue Henao. El colombiano del Sky se destapó como el líder de la formación británica, pues Mikel Landa todavía está verde en su inicio de la preparación para el Giro de Italia. Sí, ganó en las rampas del monasterio de Garrastatxu y dio protagonismo a su equipo, pero los muros de Aia, que conquistó el año pasado, fueron demasiado para él a estas alturas de su planificación.