La pizarra y el Niño salvan al Atlético

Giménez y Saúl remontan el gol inicial de Keko y Torres pone el colofón con su centenario. Óliver se reivindica

El Atlético de Madrid remontó su duelo ante el Eibar en el Vicente Calderón (3-1) para resurgir de los últimos malos resultados y mantenerse vivo en la pelea por el liderato, en una tarde que bordeó la tragedia y que terminó con fiesta rojiblanca gracias al esperado gol 100 de Fernando Torres.

El Atleti volvía a su estadio tras una mala racha de dos semanas en las que cayeron (2-1) en el duelo liguero ante el Barça en el Camp Nou y quedaron apeados de la Copa del Rey tras ceder en casa (2-3) ante el Celta y con varias bajas importantes en defensa, las de Filipe Luis, Godín, que cumplían sanción tras ser expulsados en el encuentro frente a los culés, sumada a la de Juanfran por acumulación de amarillas y la de Savic por lesión, o la de Jackson Martínez en la delantera, que el martes ponía rumbo al Guangzhou Evergrande chino.

El partido comenzó con una gran intensidad. Ambos equipos saltaron al terreno de juego con las ideas muy claras: no dejando jugar al rival con recuperaciones de balón rápidas y saliendo al contragolpe. De esta forma, los dos conjuntos neutralizaban el juego del contrario y ninguno conseguía llegar con verdadero peligro sobre la meta rival. Tan solo Correa y Griezmann por parte del Atlético y Dos Santos del lado eibarrés consiguieron inquietar a los metas, aunque sin mover el marcador inicial.

Dos dudosas decisiones arbitrales fueron lo más inquietante de los primeros cuarenta y cinco minutos. En primer lugar, los rojiblancos pidieron penalti tras una caída de Correa dentro del área transcurridos quince minutos de partido. Sin embargo, Fernández Borbalán decretó que no había nada y el 0-0 se mantuvo. A dos minutos para el final, los colchoneros se quejaron nuevamente por un fuera de juego mal pitado sobre Griezmann que se quedaba solo ante Riesgo.

Tras el descanso las cosas fueron bien distintas. Las ocasiones que no se habían visto durante la primera mitad se vieron ya desde el primer minuto de la reanudación. Saúl cometió un error imperdonable en defensa que Keko aprovechó para decantar el partido del lado de los de Mendilibar. El canterano rojiblanco —que no quiso celebrar el tanto ante su exequipo— aprovechó un pase en la frontal de Enrich y no falló en el mano a mano ante Oblak para hacer el primero de la tarde.

A partir de ahí, ambos conjuntos dejaron atrás ese juego de control de la primera mitad y volcaron el campo sobre la meta rival. Las ocasiones se sucedían en ambas porterías en un constante intercambio de golpes, y así fue como llegó el empate de los locales, recuperando viejas y buenas costumbre a balón parado. Koke desde la esquina puso un balón al primer palo al que Giménez llegó como un obús, y fuera de marca, para rematar al fondo de la red y poner de nuevo la igualada.

A media hora para el final, Simeone dio entrada a Óliver y Vietto en detrimento de Thomas y Correa, respectivamente, y fue entonces cuando se vieron los mejores minutos de los rojiblancos. El segundo de los colchoneros llegó de la misma manera que el primero. De nuevo Koke sacó a pasear el guante de su pierna derecha y puso otro centro perfecto desde el córner para que Saúl arreglara su error de la primera mitad y diera la vuelta al marcador, otra vez de cabeza.

El recién entrado Torres a punto estuvo de cerrar el encuentro en varias ocasiones. En el minuto 78, el delantero recibió un magnífico pase en largo de Óliver, brillante sobre el Calderón, que le dejó solo ante Riesgo, pero su remate se fue fuera. Apenas un par de minutos después, de nuevo Óliver firmó una preciosa jugada por banda izquierda que acabó con un centro al que el ‘9’ llegó algo trastabillado y Lillo, desde el suelo, acabó con la ocasión.

El de Fuenlabrada no dejó de intentarlo en cada jugada y finalmente logró su recompensa. El delantero remató casi desde el suelo un centro desde la izquierda de Vietto y sumó, al fin, su gol número 100 con la camiseta rojiblanca para poner el 3-1 definitivo en el marcador. El ‘Niño’ remató su cifra redonda ante el equipo contra el que había hecho su último gol en la primera vuelta.