Salvo el año 2020 en el que la pandemia lo paró todo, la Carrera del Pavo se ha mantenido impertérrita en la mañana de Navidad, convirtiéndose en una de las referencias de las fiestas que más público arrastra no solo por la originalidad de la carrera en sí, sino también porque el recorrido por el centro de la ciudad, con el paso al lado del Acueducto y la subida por la calle Cervantes se convierte en un atractivo más que interesante para propios y extraños.
De la mano del club ciclista 53×13, la Carrera del Pavo no cambia la fisonomía adquirida en años anteriores, con la salida de uno en uno desde la plaza Día Sanz hasta la llegada (el que no ponga pie a tierra), hasta la plaza del Seminario donde se ubica la subdelegación del Gobierno.
No son pocos los que, año tras año, se sorprenden no solo de que haya ciclistas que se lancen a toda velocidad por la calle Teodosio El Grande, sino también porque algunos de ellos sean capaces de no dar un solo pedal y seguir ascendiendo por la Calle Real y la de Gazzola Ceretto hasta terminar ‘obligando’ a la organización a realizar un desempate entre los mejores, lanzándose todos a la vez para tomar la curva de Cándido en la mejor posición y así llegar en con ventaja a la ascensión.
UNA CARRERA PARA LOS FAVORITOS
Es difícil que la Carrera del Pavo no sea ganada por alguno de los favoritos, como Rafa o Hugo Sanz, padre e hijo, Julio Martín o Iván Gómez. Porque para esta carrera es complicado entrenar, aunque no sería la primera vez que algún viandante se sorprende de encontrar por la noche a algún ciclista dándole al manillar de la bici a la altura de La Tropical.
También será difícil que Pedro Delgado no dispute la carrera, porque para él es casi una obligación. Lo que es casi seguro es que no la ganará, porque lo suyo era darle a los pedales, pero también porque lo que le encanta al mejor ciclista español de todos los tiempos hasta que apareció un tal Miguel Indurain es promocionar dos cosas: el ciclismo, y Segovia. Difícil encontrar un mejor embajador para ambas.
Si las previsiones meteorológicas se cumplen, aunque teniendo en cuenta cómo está transcurriendo la semana no hay nada seguro, no lloverá sobre la ciudad en la mañana del 25 de diciembre, lo que sin duda es una buena noticia para la carrera. Pero el frío que se espera en Nochebuena puede dejar el firme algo resbaladizo, sobre todo en la zona adoquinada. Con la carrera empezando a las 11:30 horas, desde una hora antes los interesados podrán inscribirse en el Centro de Recepción de visitantes. Les esperan una buena dosis de adrenalina en la bajada, cientos de segovianos en la subida y (con suerte y habilidad) un pavo, un pollo y una pularda en la línea de meta.