Guillermo Algorri y Eduardo Izquierdo son los dos técnicos con los que el Balonmano Nava completa su nómina de entrenadores de cara a la campaña 2022/23. El leonés acompañará a Álvaro Senovilla como preparador físico del primer equipo, mientras que el vallisoletano se encargará de los conjuntos juvenil y de Primera Nacional. Pero ambos tienen en mente una ‘misión’ que va más a largo plazo: Conseguir que el primer equipo de Nava de la Asunción tenga un buen número de jugadores segovianos.
“Ya no representamos solo a una zona, sino a toda la provincia de Segovia”, afirmó Algorri durante su presentación a los medios. El leonés, que el año pasado fue el entrenador del Cleba femenino, no solo será el segundo entrenador y el encargado de la preparación física, sino también “seré el nexo entre jugadores, cuerpo técnico y los equipos de base”.
“Yo vengo de León, que es un sitio donde también hay mucho balonmano, y quizá por ello he venido aquí, porque a mí me gusta mucho lo que hago y en Nava estoy muy a gusto. El club tiene que seguir trabajando a largo plazo para que siga habiendo más ‘Villagranes’ y ‘Maruganes’ en el primer equipo”, y por ello junto a Carlos Villagrán ya ha dado los primeros pasos para acudir a los colegios, “iremos, como mínimo, a diecinueve”, con el fin de ver si podemos sacar más chicos y chicas de otras zonas. Debemos de contar con más jugadores en nuestra estructura de club para que algunos de ellos puedan subir al primer equipo. Eso es fundamental para cualquier club.
UN VALLISOLETANO PARA EL FILIAL
Por su parte, Eduardo Izquierdo llega a Nava con los deberes hechos: “Conozco desde hace muchos años el trabajo de cantera del Balonmano Nava, porque algunos jugadores que salieron de aquí pasaron por mis manos en el extinto Balonmano Valladolid. Que un pueblo de 3.000 habitantes cuente con un chorro constante de jugadores de cantera es señal de que las cosas se están haciendo bien, y por fin me ha llegado el momento de participar y de aprender cuál es el secreto del Balonmano Nava”.
La llamada de Álvaro Senovilla “fue fundamental” para convencer al técnico de recalar en Nava de la Asunción, “ya que nos conocemos desde hace muchos años”. Eduardo será el encargado de conseguir que los sistemas de juego tanto el conjunto juvenil como el de Primera Nacional estén en sintonía con los que practique el primer equipo, porque más allá de competir cada partido, el objetivo es “que exista conexión entre el primer equipo y el segundo, para que en el caso de que surja algún contratiempo los chicos estén preparados para sumar al conjunto de División de Plata desde el primer día”, Por ello, la plantilla del equipo de Primera Nacional será similar a la de la pasada campaña “y va a ser mezcla de juventud y veteranía, porque necesitamos algo de experiencia, pero también físico”.