Lucía Rico es la capitana de la Gimnástica Segoviana que el pasado fin de semana festejó el título conseguido tras una impecable temporada en la Liga Doble G, en la que el equipo azulgrana no conoce la derrota. “Éste es un paso más en el fútbol femenino segoviano, ya no sólo por nuestro equipo, sino por todas las chicas de Segovia que llevan jugando al fútbol desde hace mucho tiempo y que a través de nosotras puedan verse impulsadas para continuar con su trayectoria deportiva”, afirma.

¿Qué valoración hace de la temporada?
Para nosotras ha sido muy bonita, pero también muy exigente. Desde fuera sólo se ven los resultados, como es lógico, pero detrás de todo esto hay que poner en valor el compromiso y responsabilidad individual tanto de nuestro entrenador como de cada una de nosotras; así como el trabajo en equipo y el apoyo de las familias.

¿Era el ascenso el objetivo de principio de temporada?
En un primer momento no era el objetivo. Nuestro propósito principal era asentarnos en la categoría y formar un grupo compacto como el que tenemos ahora. A medida que íbamos viendo lo que estábamos logrando, el ascenso era una realidad cada vez más cercana, pero siempre hemos sido conscientes de que había que seguir cumpliendo y disfrutando con cada entrenamiento y cada partido que es lo que nos haría seguir creciendo como equipo.

¿Cuáles están siendo las claves de esta temporada histórica?
La clave esencial es que hemos ido construyendo un equipo unido, comprometido y con ganas de disfrutar y darlo todo. Además, no tenemos límites ni complejos, queremos llegar donde haga falta. Por otro lado, el apoyo y confianza de nuestro entrenador hace que demos el máximo y luchemos por estos colores para cumplir con cada objetivo propuesto.

¿Dónde está el techo de este equipo?
No hay un techo definido ni creemos que debamos ponernos límites. El principal objetivo es seguir creciendo tanto en compañerismo, como en logros ísticos, pero sobre todo este equipo quiere ser referente para los equipos femeninos inferiores de nuestra cantera.

Como capitana, ¿qué siente al representar a un club como la Segoviana?
Es una responsabilidad, pero a la vez es un privilegio. Al final estamos construyendo el equipo desde abajo con nuestros valores y junto a un entrenador increíble. Es un orgullo poder formar parte de todo este proyecto.
Lo más importante es que todas somos clave y tenemos nuestro papel dentro del campo que nos hace ser, sin duda, el equipo que hoy somos.

Está en su último año de Ingeniería Informática en la UVa. ¿Cómo compagina los estudios con el fútbol?
Muy complicado teniendo en cuenta que los entrenamientos suponen unas cuantas horas a la semana, además del partido que disputamos los fines de semana y todo ello teniéndolo que compaginar con los estudios. No obstante, siempre procuro dedicar tiempo para estar con mis amigos y con mi familia.

¿Cómo surgió la idea de presentarse a las pruebas de la Segoviana?
Siempre he tenido muchas ganas de formar parte de un equipo de fútbol y cuando vi el cartel de que la Gimnástica Segoviana sacaba equipo femenino, lo hablé con mis amigos y mi familia y con su impulso me apunté porque creo que cada uno debe de luchar por sus sueños y nunca es tarde para cumplirlos.

¿Cuándo empezó su afición por el fútbol?
Viene de toda la vida. Desde que tenía dos años ya jugaba con el balón. Siempre he visto muchos partidos de fútbol con mi familia y, con mi hermana pequeña jugaba en el pasillo de casa a meternos goles entre puerta y puerta. Además, siempre que podía, en mi colegio, el Claret, jugaba con mis amigos.

¿Quiénes han sido sus referentes dentro del fútbol?
Cuando era pequeña admiraba mucho a Raúl González. También, hace años que sigo a Luka Modric y Aitana Bonmatí, porque son jugadores humildes y que en cada partido se esfuerzan al máximo siempre buscando lo mejor para el equipo.

¿Cómo ve el apoyo al deporte femenino tanto por parte del club como de la ciudad?
El club nos apoya mucho y está con nosotras, tenemos la suerte de tener al lado personas que creen siempre en este proyecto y luchan para conseguir lo mejor para nosotras.
Por otro lado, la ciudad en el aspecto afectivo sí nos apoya, porque la gente cuando nos ve nos anima y felicita por los logros obtenidos. No obstante, en el campo tengo que reconocer que los únicos espectadores que acuden son la familia y los amigos. Por ello, hago un llamamiento a los aficionados para que se animen y vayan a vernos y a disfrutar con nuestro fútbol.
Y también aprovecho la ocasión para poner en valor al equipo femenino, así como a todas las categorías de fútbol femenino que hay en Segovia. Si queremos seguir creciendo como ciudad en el deporte, no estaría de más poder disponer de unas instalaciones en mejores condiciones, como un campo decente con unos vestuarios y unas gradas donde pueda acudir el público a vernos jugar y disfrutar. De esta necesidad nos hemos dado cuenta al salir a jugar fuera y ver las favorables condiciones de otros campos de Castilla y León.
También hay que pedir más apoyo económico por parte de organismos oficiales y empresas. Segovia quiere ser candidata a Ciudad Europea del deporte 2025 y aquí hay una oportunidad para reivindicar dicha candidatura ofreciendo instalaciones acordes con ese nivel.

¿Qué valoración hace del éxito del deporte femenino en Segovia?
Es impresionante el potencial femenino que estamos demostrando en Segovia a través de grandes deportistas como Águeda Marqués o Jimena Velasco. Además, me gustaría recordar también a Marta González y Cristina Redondo, ya que con su esfuerzo y tesón son un gran ejemplo a seguir.

Un mensaje para aquellas niñas que quieren jugar al fútbol.
Que disfruten jugando, que la competitividad está bien porque aprendes y te exige mejorar, pero que lo esencial en el deporte y lo que el día de mañana van a recordar son las personas con las que comparten esta experiencia y todos los valores positivos que este y otros deportes transmiten como, el compromiso, la disciplina y el trabajo en equipo.