
Tres puntos de oro sacó el Unami de su partido en La Albuera teniendo como rival a una Virgen del Camino que decepcionó en el municipal segoviano, ya que ni siquiera en la recta final del encuentro cuando se manejaba con un jugador más fue capaz de generar oportunidades claras de gol sobre el marco de un Loren que cuando tuvo trabajo estuvo a buen nivel.
La transformación que sufre el Unami que juega en La Albuera con el que disputa sus partidos como visitante volvió a ponerse de manifiesto en el encuentro disputado en el municipal, donde el conjunto de Juian Folgado volvió a mostrarse como un equipo capaz de dominar el juego y de llegar al área con peligro.
Después de una primera ocasión visitante en la cabeza de Puente que remató ligeramente desviado cuando estaba en muy buena disposición para hacer el 0-1, llegaron las ocasiones segovianas. Cierto que estas no se produjeron en aluvión, pero sí en número suficiente como para obligar a La Virgen del Camino a resguardarse un poco, aunque el conjunto leonés basculaba demasiado y con cambios de juego hacia la verticalidad de Cheu el Unami era capaz de llevar peligro.
DE PENALTI
Beni fue el autor del 1-0, acertando desde los once metros el lanzamiento de un penalti señalado por el colegiado mediado el primer período. De nuevo el partido se le ponía al Unami como más le gusta, con el marcador a favor y el contrario teniendo que exponerse en busca del empate.
Pero la Virgen no corrió riesgos hasta la segunda parte. Cierto es que adelantó las líneas y llevaba peligro evidente en sus balones parados, pero el Unami no le fue a la zaga en los contraataques que generaron ocasiones mucho más claras de las que pudo tener el equipo visitante, que se aferró al buen hacer de su portero, a una bandera levantada señalando fuera de juego cuando los locales celebraban el 2-0, y a los errores en el último pase de los azules para mantenerse vivo en el partido.
Pasada la hora de partido, la Virgen del Camino fue controlando mejor los contragolpes del Unami, que buscaba a Víctor Velasco en los saques en largo para iniciar el juego sin correr riesgos. Pero el riesgo más grande llegó a un cuarto de hora para el final, cuando el conjunto local no tiró bien la línea y Sergio Rodríguez se plantó solo ante Loren, que le aguantó de manera impecable en el mano a mano para desbaratar la mejor ocasión leonesa del partido.
SIN APUROS CON DIEZ
Las cosas parecieron rodarle bastante peor al Unami poco después, cuando Víctor Velasco llegó tarde a un balón dividido y vio la segunda tarjeta amarilla que le supuso la expulsión, con lo que el Unami no solo perdía fuerza en el centro del campo sino también contundencia en la defensa de los balones aéreos.
Pero no quiso Juan Folgado retrasar demasiado al equipo, y cambió a su pareja de delanteros lanzando el mensaje a sus jugadores de que era mejor defender lo más lejos posible del área. Además, el rival tampoco llegó a aplastar a los de casa hacia su área, sin generar apenas ocasiones y el Unami, jugando a que no pasara nada aunque ello implicara cargarse de amonestaciones por perder tiempo, llegó al final del duelo conservando su renta.