Carlos Baeza recibió en la tarde del domingo la sorpresa más agradable de toda la semana de competición en el Campeonato del Mundo de pelota, la que le brindaron sus paisanos de Vallelado, con un recibimiento al son de la dulzaina y el tamboril y posteriormente, en el pabellón de la localidad, con un pasillo formado por los miembros del club de pelota por el que pasó bajo el atronador aplauso de la grada.
Un campeón del mundo no se forja de la noche a la mañana, sino que se construye con un trabajo de años. Y Carlos Baeza es campeón del mundo de pala corta porque durante años ha formado parte de una selección española que, dirigida por José Luis Arcelus, ha conseguido dar la impresión de ir ‘sobrada’ en el campeonato “Durante todo el torneo nosotros mismos nos estábamos sorprendiendo por lo bien que nos estaban saliendo las cosas. El seleccionador nos ha preparado muy bien los partidos, sabiendo cómo trabajar dependiendo de los rivales que nos llegaban y nos salió todo a pedir de boca. No nos pudo la presión, estuvimos centrados y al final nos llevamos el título”.
Pregunta.- ¿Esperaba tener como rival en la final a Francia o a Argentina?
Respuesta.- Pensábamos que la pareja más sólida iba a ser la francesa, que venía de ser campeona del mundo en 2018 en Barcelona y además era la anfitriona. Pero Argentina en la fase de liguilla hizo un despliegue físico increíble y les derrotó en tres sets, clasificándose primera de grupo. Lo de Argentina tampoco fue una sorpresa brutal, porque venían con Pablo Fusto que es uno de los mejores delanteros de la historia, y Juan Firpo que es un zaguero con muchísima clase y potencia.
P.- Durante todo el campeonato ha dado la sensación de que los partidos se jugaban a lo que quería España.
R.- Y esa sensación era la que teníamos nosotros, porque nuestra preparación de los partidos ha sido espectacular por parte del seleccionador. Por ejemplo, ante Francia en la semifinal tenía muy claro que había que hacer un saque determinado, y por ello puso a Emiliano (Skufca) que era quien mejor podía realizar ese tipo de saque que pensábamos que iba a desestabilizar a la pareja francesa por la zona izquierda de su delantero. Emiliano lo hizo increíble, clavó todos los saques, y consiguió de esta manera que yo cogiera muchas pelotas de cara, sumando muchos puntos.

“El trabajo que hizo el seleccionador en la preparación de los partidos fue espectacular y a nosotros no nos pudo la presión”

Curiosamente en la final teníamos que hacer todo lo contrario a la hora de poner la pelota en juego, porque se trataba de desplazar a su delantero, cargando el juego al zaguero. La clave ha estado en que nos hemos sabido adaptar a todos los jugadores que nos han venido, sabiendo lo que teníamos que hacer en todo momento, y ha dado la impresión de que hemos arrollado.
P.- ¿Cuándo se enteró de que iba a jugar la final?
R.- La tarde del viernes, cuando nos lo comunica el seleccionador.
P.- ¿Y durmió bien?
R.- Curiosamente estaba más nervioso el día del debut que en la final, porque en los mundiales tienes unos nervios que no son los normales de un partido y no sabes cómo vas a reaccionar. El día del debut contra Estados Unidos, durante la mañana estuve más nervioso, pero en cuanto vi que estaba bien me tranquilicé bastante. En la semifinal no hubo nervios, y en la final salí sin presión porque estábamos donde teníamos que estar.
La noche que peor he dormido ha sido la de después de ganar la final, porque estaba todavía muy activado y me costó dormir.
P.- ¿El recibimiento ha sido lo mejor de todo?
R.- Sin duda. Pensaba que algo me iban a hacer, pero no me imaginaba que iba a ser algo tan bonito, con el recibimiento en el pabellón. Me entró la ‘rilaera’ con el pasillo y los aplausos. Las medallas hacen ilusión, pero lo verdaderamente importante es entender que gracias al deporte puedes hacer sentir a la gente cosas tan bonitas como así me lo decían de corazón. Que te hagan sentir así de bien por darle cuatro golpes a una pala es algo muy emocionante.

 

“Las medallas hacen ilusión, pero lo importante es que gracias al deporte puedes hacer sentir a la gente cosas tan bonitas”

P.- Ahora hay que mantenerse.
R.- Tengo la suerte de tener a varios amigos en la élite, y todos me dicen lo mismo, que lo difícil no es llegar, que lo es, sino mantener el nivel con los años, que te respeten las lesiones, tener constancia, un buen preparador físico… y yo también lo veo así.
Pienso ahora en la final y creo que el argentino Fusto jugó ese partido mucho más presionado que yo por ser quién es. Cuando juegas sin presión lo haces más suelto sabiendo que si pierdes no pasa nada, pero hacerlo cuando toda la gente está pendiente de ti… hay que saber gestionarlo.
P.- ¿Cuáles serán los próximos objetivos?
R.- A largo plazo pasa ahora por el próximo Mundial, que se va a jugar en la ciudad argentina de San Luis en 2026, mientras que a corto tenemos el Campeonato de España, porque esto empieza dentro de poco y con el nivel que se está manteniendo en los próximos años, cualquiera te puede ganar.
P.- ¿Está preparado para que ahora la gente le mire como la referencia?
R.- Es algo de lo que me he empezado a dar cuenta en estos días. He dado un paso importante este año en lo que a madurez se refiere, y soy más sólido y leo mejor los tiempos de los partidos. Me he notado un plus en el físico, en motivación, en saber estar sobre la pista… y eso se ha notado en los resultados.