Dos semanas restan para el inicio de la Liga Asobal, y por lo visto en el encuentro de semifinales de la Copa Castilla y León que acogió un pabellón Guerreros Naveros también de pretemporada, a Álvaro Senovilla le queda mucho trabajo por hacer para poder conjuntar a una plantilla que fue inferior, porque hizo peor las cosas, que el recién ascendido Tubos Aranda.
Cierto es que a los dos equipos les queda trabajo por hacer, que al fin y al cabo quedan todavía quince días para que comience la competición liguera, pero en un encuentro con más errores que aciertos el conjunto arandino demostró encontrarse en mejor momento de forma que el segoviano.
Así quedó patente en un primer tiempo irregular, en el que los guardametas de ambos conjuntos, Luis de Vega en el marco local y Pau Guitart en el visitante, fueron los más destacados.
Comenzó liderando el marcador el equipo de casa, bien llevado por Borja Méndez, pero bastó con que Pau Guitart comenzara a mostrar su acierto bajo los palos de la portería arandina para que el conjunto entrenado por Javier Márquez no sólo tomara la iniciativa en el electrónico, sino que empezase también a sumar diferencias.
Con una defensa cada vez más asentada, y machacando a la contra en cuanto surgía la oportunidad, el Tubos Aranda llegó a gozar de una renta de cuatro goles, que pudieron ser cinco si Luis de Vega no hubiera sacado un lanzamiento desde los seis metros que dio inicio a una leve reacción segoviana, con un parcial de 4-1 que le metió en el partido.
Pero los errores en el ataque local volvieron a pesar, y el Tubos Aranda, con Dalmau Huix y Juan Tamayo haciendo bueno el gran partido en la portería de Guitart, controlaron el arreón del Balonmano Nava para llevar el partido al 13-16 con el que se llegó al descanso. Pudo ser peor porque Luis de Vega mantuvo al equipo con sus intervenciones, pero sin duda bueno no estaba siendo.
UN CONTRAGOLPE LOCAL EN 60 MINUTOS
Pese a terminar la primer mitad con un jugador menos, y sufrir hasta cuatro exclusiones más en la reanudación, el equipo arandino mostró mucha solidez a la hora de defender su renta favorable frente a un Balonmano Nava muy distinto al de la pasada temporada. Se acabó el vértigo de los ataques rápidos y contragoles, la defensa estuvo muy lejos de parecer asentada en un 6:0 demasiado pasivo en ocasiones, y en ataque tampoco hubo la claridad de ideas suficientes como para aprovechar los más de nueve minutos en superioridad numérica para meterse de lleno en el encuentro.
De nuevo con Guitart haciéndose presente en los momentos importantes, el cuadro visitante fue manteniéndose al frente del marcador, mientras que su oponente fue sumando errores sobre todo en el apartado defensivo, con demasiados desajustes que dejaban mucho espacio para los lanzadores, pero también en un ataque no fue todo lo efectivo que se le supone a un equipo que busca remontar un marcador adverso.
Pese a ello, el equipo navero tuvo una oportunidades para igualar el choque a nueve minutos para el final, pero un nuevo error en el ataque le dio aire al Tubos Aranda, que encontró a Arthur de Souza al estilete que necesitaba para volver a adquirir una renta de cuatro goles, suficiente para llegar al tramo final del encuentro con la victoria asegurada.