Visados de dirección de obra nueva en Castilla y León (10cmx11cm)
Visados de dirección de obra nueva en Castilla y León (10cmx11cm)

El ‘ladrillo’ vuelve a crecer con fuerza en Castilla y León. La Comunidad no había recuperado terreno en este sentido durante los últimos años, a diferencia de la evolución del sector en el conjunto del país, donde había experimentado un avance moderado. Sin embargo, 2023 marcó un punto de inflexión que dejó el mayor número de proyectos inmobiliarios de los últimos 12 años en la región: 6.529 visados de dirección de obra para vivienda nueva, según los datos del Ministerio de Transportes y Movilidad Sostenible, lo que supone un crecimiento del 28,9% frente a la caída nacional del 0,88.

Una fuerte subida en la que destaca por encima de todas la experimentada en Segovia, donde se vivió un 2023 muy positivo en este sentido. Así, de los 400 permisos expedidos en 2022, se pasó a los 941, siendo la mayoría pisos. Un espectacular incremento del 135,3% que ha marcado el crecimiento general de Castilla y León, que, de hecho, presenta grandes diferencias entre provincias, determinando un 2024 a dos velocidades. Tras Segovia, se encuentra Soria, con una subida del 65,97% hasta los 239 y Valladolid, con un avance del 63,13% que le ha hecho llegar a 2.628.

Mucho menos crecieron las cifras de nuevas autorizaciones en Burgos, con un aumento del 11,71% hasta 1.078, y Ávila, con una subida del 2,96% y 209. En el lado opuesto, figuran Palencia, donde la caída alcanzó el 29,%, lo que dejó la cifra de visados en 173, seguida por Zamora, con una rebaja del 28,13%, hasta los 276. A continuación, se encuantra Salamanca con una caída del 18,23% y 444 visados, y León, con un 5,25% menos y 541.

CAUSAS
Las constructoras, en medio de un panorama de incertidumbre, marcado por el alza de los precios de las materias primas y los tipos de interés, vuelven así a invertir en vivienda nueva en Castilla y León, especialmente, como hemos dicho, en Segovia. Este nicho de mercado cobra fuerza en una tierra en la que no se habían visto grandes desarrollos urbanísticos en los últimos años y en los que se venden unas 30.000 casas anuales, tanto a estrenar como de segunda mano.

La ‘digestión’ de las promociones que dejó sin vender el ‘boom’ de la crisis inmobiliaria de 2008 parece haberse terminado ya en la Comunidad, donde las constructores se han lanzado de nuevo a edificar vivienda, sobre todo, pisos y en entornos urbanos, donde se asienta el 80% de la población de la Castilla y León, aunque las casas unifamiliares siguen siendo un producto con tirón en una tierra con un gran número de municipios rurales.
Detrás de estas cifras positivas está la recuperación de la edificación en bloque, que creció en la Comunidad un 48,47% de media, con 4.279 visados para nuevos pisos, mientras en España el aumento fue mucho menor, con un tímido 1,14%. En el lado opuesto, las casas, chalets y adosados sumaron 2.250 visados, un 3,26%más, frente a la caída del conjunto del país, del 7,17%.