Vista panorámica de Sepúlveda. / JOSÉ ANTONIO SANTOS
Vista panorámica de Sepúlveda. / JOSÉ ANTONIO SANTOS

La provincia de Segovia registró un crecimiento del 73,4% en durante el 2022 respecto a los datos del 2021 -año marcado por las limitaciones de la pandemia-, con hasta 260.603 pernoctaciones, según refleja la Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos Extrahoteleros, publicada este miércoles por el Instituto Nacional de Estadística (INE). Estas cifras representan la mayor subida de la Comunidad y el octavo lugar a nivel nacional. Asimismo, en cuanto al número de viajeros contabilizados, Segovia experimentó el mayor incremento, con un 68% hasta los 120.052.

En el conjunto de Castilla y León, la Comunidad se acercó en 2022 a las cifras prepandemia en turismo rural, al registrar un total de 1.770.311 pernoctaciones, apenas 55.000 menos que las 1.825.064 de 2019, y que además suponen un crecimiento del 25,1% respecto a las de 2021, que fueron 1.414.876. Con estas cifras, Castilla y León continúa liderando los datos en turismo rural en España, también en lo relativo al número de viajeros, ya que se contabilizaron 743.605, aún por debajo de los 824.537 de 2019 pero un 32,5 por ciento por encima de los 561.414 de 2021.

La Encuesta de Ocupación en Alojamientos Turísticos Extrahoteleros sitúa en un 22,2% el crecimiento de pernoctaciones en alojamientos de turismo rural a nivel nacional en 2022, hasta contabilizar 11,95 millones, mientras que el número de viajeros, situado en 4,35, creció un 31,8% con respecto a 2021. De esta manera, Castilla y León acumula el 17,1% de los viajeros y el 14,8% de las pernoctaciones a nivel nacional, con Baleares situada a continuación con un 11,7%.

No obstante, en relación al mercado nacional de viajeros y pernoctaciones, Castilla y León agrupa uno de cada cinco viajeros, dado que los 687.884 registrados en los alojamientos de turismo rural en la Comunidad supusieron el 19,7% de los 3.492.956 viajeros residentes en España, y las 1.657.661 pernoctaciones registradas suponen el 18,5% de las 8.943.632 de viajeros nacionales.

La estancia media fue el único dato negativo para el posicionamiento de Castilla y León en turismo rural, ya que los 2,38 días se sitúan por debajo de los 2,53 notificados el año pasado, si bien la media nacional también se redujo de 2,89 a los 2,75 contabilizados en 2022.

Por provincias

El número de pernoctaciones presentó crecimientos en todas las provincias salvo en una, León, al comparar los datos de 2022 con 2021. Las mayores subidas las registraron las provincias de Segovia, con un crecimiento del 73,4% (260.603 pernoctaciones) y Burgos, donde aumentaron un 47,8% (246.374).

Tras ellas se sitúan las subidas de Valladolid, del 30,5% (97.596); Soria, con un 27,5% más (174.693); Palencia, con un 23,6% (109.411); Zamora, donde aumentaron las pernoctaciones un 22,1% (148.791); y Ávila, con un crecimiento del 21,4% (330.791). Más moderadas fue la subida de Salamanca, con un 3,4% hasta alcanzar las 177.644 pernoctaciones, mientras que en León descendieron un 3% hasta las 224.404.

Por lo que respecta a los viajeros, las mayores subidas las experimentaron Segovia, con un incremento del 68% hasta los 120.052; Burgos, donde el crecimiento fue del 50,6% hasta los 107.175 viajeros; y Zamora, cuyos 67.232 viajeros supusieron un 40% más que los registrados en 2021.

Por debajo ya del 40% se sitúan Ávila, con un crecimiento del 37,9% (125.248 viajeros); Valladolid, que creció un 34% en número de viajeros (42.850); Palencia, donde el crecimiento fue del 29,7% (43.871); Salamanca, con una subida del 25% (78.005); y Soria, que creció un 23% hasta los 65.193 viajeros. La cara negativa la presentó León, única provincia donde disminuyó el número de viajeros un 4,8% hasta los 93.974 en 2022.