May Escobar: “La tecnología nos ayuda a tener ciudades prósperas”

Entrevista con la actual concejala de Turismo, Innovación, Digitalización y Promoción Económica de Segovia.

Ha dedicado casi toda su carrera al ámbito digital y al trabajo social, especialmente en la lucha contra la ELA, llegando a entrar en el top 100 de mujeres líderes de España en 2011. Ahora, con 58 años, se le han abierto las puertas de la política en el Ayuntamiento de Segovia, recogiendo así el testigo de su padre, que fue alcalde de la ciudad en la década de los 90.

—¿Qué tal ha empezado la legislatura?
— Con mucho entusiasmo, así me lo dicen mis compañeros. Para mí es un cambio de vida importante y vengo con la ilusión de poder dedicar estos años a mi ciudad. Segovia me ha aportado mucho y ahora volver, después de muchos años de estudios y experiencias, para intentar que esta ciudad sea mejor es un privilegio.

—¿Cómo le propusieron ser candidata?
— Fue algo bastante casual, en un encuentro de la Vuelta Ciclista a su paso por La Granja. Allí me encontré con el actual alcalde, José Mazarías. Empezamos a hablar y un día me llamó para ofrecerme el puesto. Me lo tuve que pensar un poco, pero me pareció apasionante. Además, tenía un motivo personal para apostar por ello y realmente me apetecía volver a Segovia y entregarme a este proyecto.

—¿Ese motivo personal tenía que ver con su padre?
— Por supuesto. Mi padre siempre me ha transmitido el amor por esta ciudad, así como la responsabilidad y la integridad. Además, él se había quedado con algunos proyectos pendientes que no pudo terminar como alcalde, como un aparcamiento en Los Tilos, que ahora llevamos en nuestro programa. Así que, en ese sentido, también tenía un cargo emocional.

—Es usted patrona de la Fundación de España Digital y colaboras con la Asociación Española de Inteligencia Artificial. ¿De dónde viene ese interés por las nuevas tecnologías?
— Al poco tiempo de dejar Segovia empecé a trabajar en una consultora de nuevas tecnologías en Madrid y en un año empecé a dirigir una fundación que llevaba la sociedad de la información y el acceso a internet a colectivos desfavorecidos. La tecnología ha estado muy presente en mi vida profesional, siempre para solucionar problemas sociales o mejorar la calidad de vida de los ciudadanos. A mí me parece que las nuevas tecnologías pueden ayudar mucho a tener ciudades más prósperas, de hecho dirigí la Red Española de Ciudades Inteligentes y gracias a eso ahora tengo un bagaje muy importante para poder desarrollar e invertir ese conocimiento en Segovia.

—¿Qué le supuso estar entre las 100 mujeres líderes de España?
— Una sorpresa. Fue como mujer emprendedora e innovadora y por haber puesto en marcha la primera aceleradora de empresas sociales de base tecnológica de Europa, que sirvió de modelo para otros países como Inglaterra.

—Aún cuesta ver a mujeres en cargos importantes. ¿Qué falta para cambiar eso?
— Por una parte, yo siempre he dicho que las mujeres mujeres tenemos que ser un poco más valientes y arriesgarnos más. Por otro también es un problema de educación, de formación y de que no tenemos muchos modelos en los que fijarnos. Además, otro problema que yo me he encontrado es que, algunas veces, hay un techo de cristal inconsciente por parte de los hombres. Es decir, los hombres muchas veces están más cómodos hablando o viajando entre ellos. Es una dinámica de afinidades. Y a veces que entre una mujer interrumpe eso. Ahí tenemos que trabajar mucho y es muy importante hablar de ese tipo de igualdad, más costumbrista y cultural que de facto, porque ahora mismo mujeres y hombres tenemos las mismas oportunidades. Es un tema más cultural.

—También es hija de Milagros Lago, una famosa lotera de Segovia que llevaba una de las administraciones más antiguas de España. ¿Qué aprendió de ella?
— Muchísimas cosas. Era una mujer entusiasmada, entregada, emprendedora, valiente… un modelo. Todos los días, en algún momento, me dan ganas de llamarla porque era una mujer que transmitía muchísima positividad y alegría por donde pasaba.

—También ha sido directora general de la Fundación Francisco Luzón. ¿Qué relación tiene con la ELA que le implica tanto en la lucha contra esta enfermedad?
— Fundamentalmente, conocer a Francisco Luzón y su lucha (economista que padeció ELA). Es una enfermedad absolutamente dramática y, sin un apoyo, es casi imposible que los familiares puedan llevarla. Por eso creo que debe haber una ley que les ampare y dé a los enfermos la posibilidad de seguir con vida.

—¿Cuáles son sus retos a nivel personal para esta nueva etapa?
— Mi reto es cumplir nuestros objetivos y crear una nueva historia de futuro para Segovia. Sé que es algo muy grande, pero es muy importante pensar a lo grande. Y  tenemos la confianza de conseguirlo.