Los peregrinos del centro penitenciario culminaron este jueves su peregrinación por el Camino de San Frutos. La última etapa desde Cantalejo hasta la ermita del Santo, atravesando parte de las Hoces del Duratón, es en sus propias palabras “una de las etapas más bonitas del camino, con paisajes increíbles que en otoño cobran una espectacularidad especial”.
Participó también en esta etapa acompañando a los peregrinos el encargado de la Ermita de San Frutos y párroco de Sepúlveda, Jaime Izquierdo, quien se encargó de enseñar la ermita y explicar la vida del santo eremita y de sus hermanos.
En esta ocasión, el trabajo terapéutico consistió en reflexionar sobre las propias fortalezas.“Saber cuáles son nuestras fortalezas que nos van a ayudar a salvarnos en los momentos de crisis”, han reflexionado.
Una vez finalizada la etapa, el grupo se trasladó a Carrascal del Río, donde Henar de Pablos, alcaldesa de la localidad hizo entrega de las ‘Pajareras’ –certificación de haber finalizado el Camino de San Frutos– al grupo de peregrinos que durante cuatro etapas y más de 80 kilómetros han completado la ruta.