
La prestigiosa editorial científica Springer, radicada en Suiza, ha publicado recientemente el libro ‘The History of Water Management in the Iberian Peninsula’ (La Historia del Manejo del Agua en la Península Ibérica), elaborado por investigadores europeos, principalmente españoles y portugueses. Entre los capítulos de esta publicación se encuentra uno dedicado a las caceras segovianas, bajo el título ‘Comunidades de aguas en la vertiente norte de la Sierra de Guadarrama’, elaborado por los biólogos segovianos Mar Pinillos Rodríguez y David Martín Carretero.
La idea del libro surgió en un Workshop que se celebró en Lisboa en junio del año 2017, dado el interés de los trabajos que se expusieron en el mismo. Bajo la coordinación de Ana Rodrigues, coordinadora del Centro Interuniversitario de Historia de las Ciencias y la Tecnología de la Facultad de Ciencias de la Universidad de Lisboa, y Carmen Toribio, doctora arquitecto, especialista en Restauración de Jardines Históricos y profesora de la Escuela Técnica Superior de Arquitectura Superior de Madrid, de la Universidad Politécnica de Madrid, los autores han elaborado los diferentes capítulos, que han pasado un riguroso control de estilo y correcciones.
Pinillos y Martín llevan estudiando estas conducciones desde el año 2004, cuando consiguieron una beca de Medio Ambiente de Caja Segovia con el proyecto ‘Caceras de la provincia de Segovia, un recorrido por la tradición’. “Desde aquel momento nos dimos cuenta de la importancia cultural, ambiental e histórica de nuestras caceras, a medida que hacíamos entrevistas a los mayores de los pueblos, recorríamos los cauces y visitábamos archivos”, comenta Pinillos. Este trabajo lo han seguido realizando con sus propios recursos a lo largo de estos años, financiándolo desde hace cuatro, con las ventas de su segundo libro sobre el tema ‘Ecos del agua en la Sierra de Guadarrama’, que publicaron con su propio sello editorial. “Una de las cosas más importantes que hemos conseguido han sido las casi 130 horas de conversaciones que tenemos grabadas con los más mayores de nuestros pueblos. Sin duda, sin ellos, habría sido imposible realizar gran parte de este trabajo, pues nos han aportado muchos datos e informaciones que en los documentos históricos no aparecen”, prosigue.
Esta labor de recopilación de conocimientos tradicionales la han combinado con la visita a las distintas caceras e inventariado de los distintos elementos hidráulicos, además de la flora y la fauna presente. “Uno de los objetivos de este trabajo es dar una visión de conjunto de las caceras y la importancia que tiene el ser humano en la creación de ecosistemas diversos y de gran interés. De hecho es algo que las distintas universidades e investigadores con los que hemos tratado y trabajado ponen de manifiesto y valoran de esta investigación” aseguran los biólogos. A pesar de la escasez de recursos y ayudas, su idea es continuar con estas investigaciones que, consideran, “van dando sus frutos”.