Quema del ‘pelele’ por las alcaldesas del barrio de Nueva Segovia. / E. A.

La tradición no se pierde. Son varios los barrios de la ciudad de Segovia en los que las mujeres celebran todos los años en febrero, en torno al día 5, festividad de Santa Águeda, actos sociales y religiosos, sin que falten, por supuesto, procesiones, la tajada de chorizo, bailes de rueda y animadas jotas, en las que lucen manteos, jubones… Y monteras en el caso de las alcaldesas. Algunas queman el pelele, que simboliza todo lo malo que hacen los hombres, como la guerra, y todas las aguederas se reivindican, que nunca está de más.

Hoy sábado las agrupaciones de aguederas de dos barrios segovianos, San Millán y Nueva Segovia, han adelantado los principales actos festivos, algo que mañana domingo continuarán en Zamarramala, la fiesta más arraigada y declarada de Interés Turístico Nacional, San Lorenzo, Santo Tomás y San José.

Las aguederas de San Millán y Nueva Segovia anticipan su día grande
Baile de rueda de las aguederas de Nueva Segovia en la procesión. / E. A.

En Nueva Segovia, donde comenzaron las celebraciones el día 2 con una chocolatada, este mediodía, tras la misa solemne en la Iglesia parroquial de la Resurrección del Señor, la empresaria Rocío Ruiz Aragoneses pronunció un pregón reivindicativo, dando paso al cambio de montera, seguido de procesión con la imagen de la Santa y de la quema del ‘pelele’, que portaba un cartel de ‘No a la guerra’. Para rematar, las aguederas del barrio han invitado a los presentes a la típica ‘tajada’ y a limonada antes de marcharse a una comida conjunta.

Las aguederas de San Millán y Nueva Segovia anticipan su día grande
En San Millán, las aguederas bailaron hasta un pasodoble en honor a su Santa. / E. A.

En San Millán el acto central ha tenido lugar en el interior del templo, con acompañamiento musical de Feliciano Ituero. Las alcaldesas, Engracia Sanz y Ángeles Benito, nombraron Alcaldesa de Honor a Mª Ángeles Jiménez.

A la salida hubo pasacalles amenizado por un grupo de dulzaina y tamboril y vino español y tajada en el centro cívico del barrio.