En todas las familias hay un padre, una abuela, un tío o un cuñado que no pierde ocasión para aconsejar a sus parientes que ahorren por lo que pueda pesar. Pero con las administraciones públicas, y concretamente con los ayuntamientos, hay disparidad de opiniones. Ministros hubo que legislaron para que las entidades locales ahorraran incluso más que el propio Estado pero en el momento actual tener deudas, dentro de un límite, no está mal considerado, siempre que la capacidad de financiación esté asegurada. El Ayuntamiento de Segovia lleva años ahorrando, principalmente por remanentes de tesorería pero también por remanentes de crédito y otros conceptos. La Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) ha actualizado este mes de agosto su Observatorio de Corporaciones Locales con datos sobre la capacidad o necesidad de financiación de cada entidad local a finales del año pasado, las liquidaciones presupuestarias y la deuda viva existente en 2021, así como los presupuestos iniciales de 2022.
Según ese observatorio tras la liquidación del presupuesto, el consistorio segoviano, tras la liquidación del presupuesto del año pasado, acumulaba más de 12.800.000 euros de ahorro (solo con remanentes de Tesorería), lo que supone 251 euros por habitante.
Al mismo tiempo, la deuda financiera, el dinero que el Ayuntamiento adeuda a los bancos por créditos, ascendía a 25 millones de euros, lo que indica un porcentaje del 40% sobre los ingresos corrientes de la entidad, muy por debajo todavía del límite peligroso del 75%, por encima del cual si tuviera que endeudarse más tendría que solicitar permiso a la Junta de Castilla y León, o del 110% que limitaría su capacidad de endeudamiento y comprometería sus sostenibilidad financiera.
Hay que advertir que ese porcentaje del 40% está por encima de la media de las entidades locales de la comunidad autónoma (3,82%) y de la media del conjunto del Estado (12,27%), aunque presenta un valor similar a la media de los ayuntamientos del tramo de población entre los 50.000 y los 100.000 euros.
Otro dato que aporta el observatorio de la AIReF es que tras la liquidación del presupuesto municipal, Segovia obtuvo un superávit de 5,6 millones.
Una de las principales críticas de la oposición en los últimos años, y especialmente en relación al presupuesto de 2021, es la incapacidad del gobierno municipal para su ejecución, de ahí esas críticas a un ahorro que alegan no se debe a una buena gestión de los servicios o de las inversiones sino a lo contrario.
Sin embargo, el concejal de Hacienda, Jesús García Zamora, asegura que su grado de ejecución estuvo por encima del 80% y que en los últimos años ha estado entre el 70 y el 80 a pesar de la pandemia y de que, en el caso de las inversiones reales, la casuística con obras licitadas ha sido variada, desde empresas que no presentan la documentación después de adjudicarse un contrato a, como ocurrió con las obras de pavimentación de Padre Claret, que la adjudicataria alegara que no tenía posibilidad de proveerse del material necesario.
En cuanto a la deuda, el edil socialista saca pecho y presume de gestión, indicando que hay informes, como el del Consejo de Cuentas de Castilla y León hace unos años, que así lo han puesto de manifiesto, en comparación con el resto de capitales de provincia de la Comunidad. Recuerda que parte de la deuda del Ayuntamiento se arrastra desde la construcción de las viviendas sociales para jóvenes en la calle de Bomberos por un crédito de la Empresa Municipal de Vivienda y Suelo (Evisego).
Comparativa
Todas las comparaciones son odiosas y cada ciudad tiene unas características distintas que la hacen única y eso también va por sus habitantes, sus ayuntamientos y los respectivos presupuestos. El observatorio de la AIReF permite comparar datos entre entidades y, por ejemplo, en liquidación presupuestaria, dos capitales de provincia de población cercana a Segovia, Ávila (por encima de los 57.000 habitantes) y Huesca (en torno a 53.000) tuvieron también superávit; en la primera, que además es también Ciudad Patrimonio de la Humanidad e igualmente forma parte de Castilla y León, ascendió a 9,43 millones de euros, y en la ciudad aragonesa a 5,81, ligeramente por encima esta última que la capital segoviana.
Sin embargo, en otras variables, como los ingresos obtenidos por tasas municipales, Segovia supera ampliamente a las otras dos, con 11,19 millones en 2021, por 7,4 de Huesca y 5,55 de Ávila.
En los ingresos por impuestos están más parejas, siendo en este caso Ávila que más recauda, más de 27 millones, seguida de Segovia (26,97) y Huesca (22,96).
En cuanto al porcentaje de deuda financiera sobre ingresos, en Ávila es del 48% y en Huesca del 30%, mientras en Segovia el año pasado se situó en un 40%.
En el caso del ayuntamiento segoviano, la deuda financiera se ha incrementado desde hace una década en torno a 700.000 euros, hasta los 25 millones al cierre de 2021, aunque su pico, 26,6 millones, lo tuvo en 2017 y desde entonces se ha ido reduciendo.
La herramienta que la AIReF ha incorporado a su web permite visualizar qué recursos obtienen las entidades locales y cómo los emplean. También ofrece la posibilidad de ver la evolución en el tiempo de las principales variables que definen su situación económica y posibilita hacer comparaciones entre entidades semejantes en competencias y financiación, que permitan detectar posibles elementos de mejora en la gestión. Se actualiza periódicamente.
Además, es objeto de mejora constante, por lo que próximamente incorporará, entre otros aspectos, información de las previsiones AIReF de las entidades que analiza individualmente, e incluyendo un nuevo módulo sobre sostenibilidad de medio plazo de las entidades locales, en el que en base a una pluralidad de indicadores de sostenibilidad, se podrá ordenar a las corporaciones locales en rankings según su situación en cada uno de estos indicadores.
PSOE
El concejal de Economía y Hacienda, Jesús García Zamora, resta importancia a la imposibilidad de ejecutar algunas inversiones en el ejercicio en el que se han presupuestado. Alega que cuando dependen de procedimientos de licitación abiertos, de adjudicaciones de contratos, siempre hay imponderables contra los que el gobierno municipal poco puede hacer. Insiste en que lo importante para los vecinos “es que se recojan las basuras, que tenga luz en su calle, que cuando abra el grifo tenga agua potable, que pueda consultar un libro o un periódico en la biblioteca, que le arreglen el bache de su calle y que los jardines estén cuidados”.
García Zamora defiende la calidad de los servicios que ofrece el Ayuntamiento y también que para eso es necesario obtener ingresos y, entre ellos, unas tasas y unos impuestos, que aunque en diferentes estudios puedan estar por encima de los de otras localidades de la misma población, cree que son necesarios y que en Segovia se han congelado en los últimos años.
Insiste, por otro lado, en el perjuicio que para un ayuntamiento como el de Segovia puede acarrear la merma de ingresos por un impuesto como el de Plusvalía por una sentencia de alcance nacional.
PP
El portavoz del Partido Popular, Pablo Pérez, señala que los datos que recoge el observatorio de la AIReF de agosto no recogen lo que considera el presupuesto actualizado en lo relativo a la liquidación del de 2021, ya que no incluye la incorporación de remanentes de otros años a ese ejercicio, de ahí que la desviación entre lo presupuestado y lo liquidado no sea relevante en el citado estudio de la autoridad independiente.
Por otra parte, a Pérez le parece llamativo el incremento año a año de los gastos de Personal y de bienes y servicios, sobre todo de gastos corrientes del Ayuntamiento, comparados, por ejemplo, con otras capitales de provincia del tramo de población de Segovia. En su opinión, estas partidas a medio plazo pueden condicionar la capacidad del Ayuntamiento para llevar a cabo inversiones reales como obras importantes en la ciudad. Indica, por ejemplo, que muy pronto, tendrán que tenerse en cuenta los gastos de mantenimiento de edificios como el CIDE o el Teatro Cervantes.
Reconoce que el endeudamiento del Ayuntamiento no es un problema en este momento pero señala que los sucesivos gobiernos socialistas, a parte del frustrado CAT, no han abordado grandes proyectos para la ciudad.
CIUDADANOS
Fue el Grupo Municipal de Ciudadanos el que la semana pasada llamó la atención sobre los datos del observatorio de la AIReF, aunque en el caso del pago a proveedores del mes de mayo, por encima del límite legal de los 36 días, sobre los que el concejal de Hacienda ya ofreció explicaciones.
Explicaciones e información de las que, según la portavoz de la formación naranja, Noemí Otero, hay un gran déficit en el gobierno municipal. De hecho Cs ha contabilizado cuarenta solicitudes de información sin respuesta en el actual mandato corporativo.
Por eso Otero tiene ya la ‘escopeta' dialéctica cargada y a finales de mes ofrecerá una rueda de prensa para poner sobre la mesa la escasa licitación de obra pública por parte del Ayuntamiento este año. Ciudadanos coincide con el resto de la oposición en que de nada sirve presupuestar si luego no se ejecuta lo presupuestado y denuncia lo que considera falta de gestión como “dejadez y desidia”.
Llama la atención, además, sobre la alta carga impositiva — “el ‘tasazo' del agua del que ya no se habla o los tipos del IBI en Segovia”, señala— que no concuerdan, a su juicio, con unos servicios donde la calidad no es la deseable “porque no se fiscalizan”.
PODEMOS
Desde Podemos, su portavoz y único concejal, Guillermo San Juan, reitera los argumentos que ya utilizó cuando se liquidó el presupuesto de 2021. Maneja los datos que ofreció entonces el informe de Intervención que indican un ahorro bruto de 8,56 millones y un ahorro neto de 4,11 millones, así como un superávit de 4,36 millones. Pero, sobre todo, destaca que a 31 de diciembre los fondos líquidos en bancos del Ayuntamiento de Segovia ascendían a 24,2 millones de euros, “casi un 40% del presupuesto que genera en el banco unos intereses a favor tan lucrativos como 48 euros al cierre del ejercicio”, indica.
En este sentido, sostiene que a pesar de la Ley Montoro, “y lo que dicen Feijóo y Ayuso” en relación a la estabilidad financiera y al ahorro de las entidades públicas, “un ayuntamiento no es un banco, ni una empresa. Es una institución que está para resolver problemas y necesidades a la ciudadanía, para cuidar y para proteger. Tiene un papel fundamental como agente que interviene en la economía y empuja la innovación y por eso hablamos de que Segovia tenga un Ayuntamiento emprendedor al que no le preocupen problemas que no tiene, como la deuda, y sí de resolver problemas que le incumben”.