Un agente, con un galgo rescatado en una operación. / E. A.

La Guardia Civil ha intensificado la lucha contra el abandono y el maltrato de perros con una campaña que se está articulando con dos líneas de trabajo. Por un lado realiza operativos de servicio para evitar la actividad delictiva patrimonial y de maltrato contra los perros utilizados como medios auxiliares de caza, sobre todo de las razas galgo y podenco y en un segundo lugar las labores se centran en identificar y descubrir a los presuntos delincuentes.

De esta manera ha incrementado los controles sobre las obligaciones legales para la tenencia de estos animales, sobre todo respecto a identificación individual y condiciones higiénico-sanitarias, y especialmente en las modalidades de caza mayor, caza menor y la caza de liebre con galgo.

También ha intensificado el control de los requisitos que la actual legislación exige a los poseedores de este tipo de animales de compañía: implantación de microchip; cartilla sanitaria; tratamientos veterinarios; y, en su caso, por ser animal potencialmente peligroso, licencia administrativa para su tenencia, seguro de responsabilidad civil, así como las condiciones para su paseo por las vías públicas (siempre con bozal y sujeto mediante correa no extensible).

Como consecuencia, se han comprobado, desde octubre y hasta el momento, 50 infracciones administrativas a la Ley de protección de los animales de compañía de Castilla y León, entre las que destacan la posesión de perros careciendo de identificación individual mediante microchip y no administrar los tratamientos veterinarios obligatorios (vacuna antirrábica).

La actividad diaria que realiza la Guardia Civil está encaminada en la inspección de tiendas de animales, visita a granjas y grandes centros de cría, supervisión del transporte de animales y detención de quienes maltratan animales. Asimismo, lleva a cabo otras acciones como es el rescate de ejemplares en situación crítica o el traslado o custodia de animales intervenidos en operaciones con el fin de proporcionarles un mejor destino.