
La «Alfombra de Momentos», el gran tapiz que cubrirá la Plaza del Azoguejo en la Noche de Luna Llena, el 7 de julio, con telas aportadas por los ciudadanos, alcanzará entre 700 u 800 metros cuadrados. La concejala de Cultura, Clara Luquero, considera que ésta será, según las primeras estimaciones, la superficie de la «gigantesca alfombra» que convertirá el Azoguejo en la «sala de estar de todos los segovianos»; un tapiz que tendrá una forma «más bien rectangular, aunque adaptándose a la forma de la Plazuela» y que se comenzará a diseñar y confeccionar en los próximos días en la Fábrica de Borra.
Luquero asistió ayer al acto simbólico de entrega por parte de la Ronda Segovia de un trozo de paño pardo de una de las capas que lucen los integrantes de la formación segoviana.
En la Plaza Mayor, hasta donde llegó ayer el autobús de los Laboratorios de Creatividad Ciudadana (LABCC), los miembros de la Ronda entregaron el paño que integrará la «Alfombra de Momentos». Ángel Román, miembro carismático de la Ronda, explicó ayer que la formación musical, que cumplirá en septiembre los 36 años de existencia, ha querido entregar el paño en un acto público para demostrar su apoyo a una iniciativa «muy hermosa, que sirve para aglutinar a todos los segovianos en torno a la cultura». Como se sabe, Cultura aspira a convertir el Azoguejo «en una gran sala de estar» gracias a una alfombra confeccionada por los propios ciudadanos aportando telas que tengan algún valor sentimental para ellos, que tengan un significado íntimo, personal. «Cuando nos enteramos de la iniciativa de la alfombra, decidimos aportar algo simbólico de la Ronda, y qué mejor que un paño de una capa parda con la que empezamos a salir a la calle», apuntó Román.
En este sentido, Luquero agradeció el gesto de la formación, al igual que el han hecho otros grupos de folclore, como La Esteva, «que han hecho también una cosa preciosa con elementos ornamentales del traje segoviano», dijo.
La concejala aseguró que Cultura dispone ya de «mucho material y muy distinto» para confeccionar la alfombra; con tejidos muy distintos, desde sedas hasta edredones, desde telas finas hasta otras muy gruesas, desde prendas y retales de colores sobrios hasta los más chillones. Hay prendas de vestir, pero, fundamentalmente, telas de decoración del hogar, como retales de cortinas. «Nos llevan retales que les sobraron de las cortinas que llevan cinco años en su salón de casa, significa mucho porque es el estampado que ven a diario (…) también está quien nos ha traído un tapete de mus, porque este juego es muy importante en su vida, hay de todo….», dijo Luquero, quien animó a los segovianos a seguir entregando telas porque «tenemos mucho, hemos tenido muy buena respuesta, pero nos hace falta mucho».
Los ciudadanos pueden entregar telas y prendas en el autobús del LABCC que recorre los barrios y que estos días tendrá parada en la Plaza Mayor; además de en la recepción del Ayuntamiento, en el Centro de Recepción de Visitantes y en la Concejalía de Cultura.
Cosido
Luquero desveló que ayer miércoles ya se llevó el cargamento de telas recogido hasta ahora hasta la Fábrica de Borra. En el espacio donde se desarrolló el taller de empleo sobre textil, y con la maquinaria que existe en el aula, se comenzará a fabricar la alfombra. Un equipo de ocho personas comenzarán el trabajo, al que se sumarán todas aquellas personas que se quieran unir de forma voluntaria. Al mismo tiempo, se trabajará en el diseño y estética de la alfombra, que tendrá un tono gradual. «Lo estamos estudiando todavía, pero puede ir de un espacio central de colores claros hasta situar los oscuros en los extremos».
La alfombra se colocará en la Plaza del Azoguejo el 7 de julio. Los ciudadanos podrán descansar sobre ella y escuchar música. «Y habrá alguna sorpresa más», concluyó Luquero.