Ponentes, organizadores y anfitriones posan en el claustro de la Academia de Artillería. / Kamarero

La Academia de Artillería acogió en la tarde de ayer el primer ‘Encuentro de Salud y Nutrición' que organiza la Fundación . Bajo el título ‘Nuevas tendencias en la prevención y tratamiento de la Hipercolesterolemia' y con la moderación del presidente del Colegio de Médicos de Segovia, Enrique Guilabert, los doctores Pedro Mata, cardiólogo y presidente de la Fundación Española de Hipercolesterolemia, y José Carlos Castro, endocrinólogo del Hospital General de Segovia, expusieron ante un centenar de personas los últimos conocimientos sobre esta enfermedad cardiovascular.

El doctor Mata, uno de los mayores especialistas a nivel internacional sobre hipercolesterolemia familiar, profundizó en que el colesterol alto no siempre está determinado por los hábitos alimenticios y diarios. » Dentro de la enfermedad cardiovascular, el colesterol es uno de los factores de riesgo más importantes y dentro de ese colesterol, tenemos un colesterol que en la mayoría de la población puede estar elevado por hábitos de vida inadecuados, en los que la alimentación, el sobrepeso, el ejercicio físico tienen mucha importancia. Pero también hay un colesterol que es genético, que serían las hipercolesterolemias familiares y que tienen mucha importancia porque estas personas pueden tener infartos en edades tan jóvenes de la vida como en la tercera y cuarta década. A estas personas les afecta la familia pero se puede detectar precozmente y tenemos tratamiento; por ello tiene importancia que la población conozca estos trastornos y que el colesterol no solo puede producirse por una dieta inapropiada, sino que en ocasiones podemos tenerlo por causa genética», explicó.

Para Mata, esto representa un «avance» importante, puesto que se trata de una «medicina de precisión» a través de la cual poder identificar genéticamente a las personas e incluso predecir mayor o menor riesgo cardiovascular. «Es por donde va la medicina del futuro», aseveró el doctor.

Ello se puede conseguir inicialmente a través de una prueba «muy fácil» que, de la misma manera que se detecta la glucemia elevada, permite conocer el colesterol elevado a partir de unas cifras generalmente superiores a 300 miligramos decilitro. «Si una persona lo tiene hay que preguntar qué pasa en su familia porque la mitad de la familia puede tenerlo elevado; con lo cual, con una cosa tan simple ya podemos estar aproximándonos a ese diagnóstico que luego se confirma mediante una prueba genética», aseguró el cardiólogo.

Por su parte, José Carlos Cartro incidió en la importancia de seguir insistiendo «en lo que siempre ha sido la base del tratamiento de la hipercolesterolemia, que es la dieta y los hábitos de vida saludable».

Lo que más se promociona, recalcó, es el estilo de vida y la dieta mediterránea, sobre todo a base de vegetales y aceite de oliva, el ejercicio y evitar alimentos procesados, carnes y otro tipo de grasas poco saludables.

A este respecto, Pedro Mata apuntó que un reciente estudio en el que han participado casi 200 países –entre ellos España– ha concluido que los países en los que más y mejor se siguen las recomendaciones en materia de alimentación y hábitos, y que no casualmente son los países con una mayor esperanza de vida, son España y Japón.

Como resumen, informaron, hay tres grupos de nutrientes que son claves en el riesgo de la enfermedad cardiovascular y el cáncer: el exceso de sal, el exceso de hidratos de carbono refinados y el consumo muy bajo de frutas, verduras y cereales integrales.