Esta semana, el grupo del PSOE en el Ayuntamiento de Segovia reclamaba al equipo de Gobierno la apertura de la pista de pump track ubicada en el barrio de Nueva Segovia, urgiendo que se haga con garantías de seguridad para sus usuarios. Los socialistas exigían una explicación sobre los motivos que impiden recepcionar dicha obra, alertando de que, en el caso de que quedaran aún trabajos por ejecutar, la Concejalía de Deportes debería tomar medidas para impedir su acceso y utilización al no existir el visado por parte de los técnicos municipales.
La respuesta del Ayuntamiento, con el grupo del PP al frente, no se ha hecho esperar mucho, afirmando que está a la espera de que la empresa adjudicataria de la construcción, New vision sports, concluya los trabajos de manera inmediata, corrigiendo los defectos detectados por los técnicos municipales en algunos puntos de la instalación y rematando la actuación en otros. Precisamente, el pasado martes se produjo una reunión entre los representantes de dicha compañía y técnicos municipales y trabajadores del Instituto Municipal de Deportes (IMD), además del concejal de Deportes, Jesús Garrido. Un encuentro convocado para repasar las deficiencias que aún tiene la pista de pump track.
Los populares afirman que la adjudicataria es responsable de esa situación, acusando también a la oposición de elaborar un pliego de condiciones con “importantes carencias” cuando formaban parte del equipo de Gobierno. Según ellos, esto impide hasta ahora la emisión de la certificación del final de obra y la apertura de la infraestructura, destinada al disfrute de practicantes de modalidades como el patinaje en línea, el patinete, el skate o el ciclismo BMX de distintos niveles de habilidad.
Jesús Garrido ha mostrado su sorpresa por el aparente desconocimiento de la situación que ha expresado un grupo de la oposición municipal, ya que afirma que en el departamento de Deportes se mantienen reuniones periódicas con todos ellos. No obstante, les recuerda que disponen de comunicación directa y constante con el IMD para recabar “la información que necesiten en cada momento” sobre cualquier actuación en marcha.
La construcción se encuentra cerrada mediante cintas y carteles para impedir el paso de los usuarios por la eventual peligrosidad de utilizar la instalación en esas condiciones y sin las certificaciones pertinentes. Mientras, la Policía Local trata de evitar usos indebidos durante las patrullas que realizan sus agentes por el barrio. n