Una normativa europea aconseja a los ayuntamientos la conveniencia de reservar una serie de aparcamientos para los usuarios de las farmacias, sobre todo, en momentos en los que la compra de medicamentos se hace de forma urgente para atender a un enfermo.
El objetivo de esta iniciativa es que la atención farmacéutica, tanto en horario de apertura como en el horario de guardia, pueda llevarse a cabo sin que los usuarios se expongan a sanciones de tráfico y para que esta atención no suponga una molestia para los demás conductores, ya que con estas plazas se eliminarías las dobles filas y los estacionamientos irregulares.
De este modo, el Consistorio puso en marcha un plan para atender esta necesidad y que el equipo de José Mazarías incluyó en su programa electoral de mayo. No era una idea original, por cuanto ya funcionaba en algunos municipios españoles. Además el grupo político ‘Segovia Existe’ lo prometió en la pasada legislatura.
En todo caso, durante estos días se ha completado el proceso de señalización con el pintado de cruces verdes sobre el pavimento, que se añade a la colocación de señalización vertical que se había puesto hace unas semanas.
Desde la Concejalía de Tráfico y Seguridad Ciudadana se ha venido llevando a cabo esta actuación. Comenzó en el barrio de Nueva Segovia y los barrios de San José Obrero y La Albuera. Posteriormente la medida se ha extendido por el resto de las calles en las que se encuentran las farmacias.
En total son 23 los establecimientos de este tipo que existen en la ciudad. De ellos 19 ya disponen de plazas de aparcamiento reservadas en la puerta o muy cerca de ella. En la mayoría de los casos son dos plazas con las que cuenta, mientras que en otros casos dispone de una sola.
Al margen se encuentran otras cuatro farmacias que no requieren de plazas de aparcamiento reservadas, pues se encuentran situadas en zonas peatonales y por tanto no se puede llegar a ellas en vehículo de cuatro ruedas. Se trata de las farmacias situadas en la plaza del Corpus y de las calles Juan Bravo, Cervantes y San Francisco.
Las 19 farmacias que disponen ya de plazas de aparcamiento son Palomo Palomo (plaza de Espronceda), Fernández Olalla (Vicente Aleixandre, 13), Antón Elosegui (plaza de San José, 1), Useros Hernández (Santa Teresa de Jesús, 24), Rodríguez del Fresno (Marqués de Lozoya, 13), Postigo Rubio (Vía Roma, 30), Cuéllar Basterrechea (Santa Catalina, 18), Serrano Velasco (Cronista Lecea, 6), Rujas Gómez (Larga, 5), Rebeca de Elías Fernández (Constitución, 5), Ruano Vázquez (Muerte y Vida, 2), Tamayo Barbero (José Zorrilla, 41), Benavent Atienza (José Zorrilla, 117), Sanz de Pablos (Conde Sepúlveda, 33), Tamayo Santamaría (Santo Tomás, 5), Doctor Ramos (Carretera de Villacastín, 10), Carril Batalla (Carretera de Villacastín, 50), Pérez Sopeña (Ezequiel González, 21) y Aguilar Vizcaíno (plaza de Tirso de Molina, 4).
Falta alguna por señalizar, como una de José Zorrilla, que se encuentra pendiente de que finalicen las obras de rehabilitación de un edificio próximo y que está ocupando parte de la vía pública, lo que dificulta llevar a cabo la medida actual.
Junto a cada plaza de aparcamiento se ha colocado la señal vertical que indica el tiempo que cada vehículo debe permanecer como máximo y que es de quince minutos. “Es el tiempo que estimamos suficiente para efectuar la compra en la farmacia y volver”, explicó la concejala de Tráfico.
De este modo, el funcionamiento es el mismo que el de una plaza de carga y descarga; si bien para éstas se requiere una tarjeta de autorización. Es la Policía Local la que vigila que estas plazas estén siendo utilizadas para este fin, y que no se supere el tiempo máximo permitido.
En los horarios de cierre o vacaciones de las farmacias, estas plazas se reintegrarán en el uso normal de aparcamiento de modo que pueden mantenerse como el resto de espacios de las vías en las que se encuentran.
PROMESA ELECTORAL
Esta medida fue anunciada por el alcalde, José Mazarías, en la presentación de su plan de movilidad de la ciudad. Junto a otros concejales dijo que se reservarían espacios de aparcamiento delante de las farmacias durante el tiempo que éstas estuviera abiertas para que los clientes puedan acceder de forma rápida, y además no entorpecer el tráfico en la zona.
La medida ha sido muy demandada por el colectivo de usuarios, pero también de los dueños de los establecimientos.
La presidenta del Colegio de Farmacéuticos de Segovia, Marta Ruano, ha respaldado la medida adoptada por el Ayuntamiento de Segovia porque, según dice, beneficia a los pacientes. “Es una buena idea pues resulta habitual que los clientes lleguen agobiados porque han dado muchas vueltas, no han encontrado sitio y han aparcado mal ante la premura que requieren cuando acuden de forma urgente a adquirir algún medicamento”.
Cuando un paciente acude al médico, resulta habitual que a continuación necesite adquirir algún medicamento. Y según el momento del día de que se trate, las posibilidades de encontrar un hueco para dejar el coche son muy variables.
Con esta medida, el Ayuntamiento pretende facilitar a las farmacias la atención que dan a sus pacientes, y por otro, evitar que se vean obligados a aparcar en doble fila, con el perjuicio que esto conlleva para la agilidad del tráfico, según la concejala Raquel Alonso. “Las farmacias son establecimientos que pertenecen al ámbito sanitario, y a menudo están condicionadas por situaciones de urgencia”, señala.
Desde el Consistorio se pide a los ciudadanos que apliquen el civismo y el sentido común a la hora de usar estas reservas de aparcamientos, para que se dejen para casos de urgencias o para aquellas personas que tengan más difícil la movilidad, además de para no exceder el tiempo estimado de su utilización
Las farmacias, por su parte, están obligadas a comunicar a la Policía Local el horario de apertura al público, así como de las fechas en que se encuentran de guardia.
Desde el Ayuntamiento no ha sido necesario modificar la ordenanza de circulación dado que la normativa autonómica ya contempla la posibilidad de habilitar espacios específicos para esta función.
Además de este medida, el equipo de Gobierno de Mazarías había propuesto otras actuaciones para mejorar la circulación y la movilidad en la ciudad. Una de las más destacadas fue la construcción del aparcamiento de Los Tilos, un proyecto manejado ya en anteriores legislaturas. También se propuso crear rampas o escaleras mecánicas, y el uso de los aparcamientos subterráneos municipales como zonas ORA para liberar 300 nuevas plazas de estacionamiento.
Con estas medidas, el objetivo que persigue el nuevo ejecutivo es descongestionar los aparcamientos en superficie y mejorar con ello el tráfico, favoreciendo el comercio y facilitando las compras.