
No ha pasado ni un mes desde que cruzó el arco venteño. “De Madrid al cielo”, dicen. De momento, en ascensión, pero con los pies en el suelo. Ha sido declarado ‘triunfador’ y torero ‘revelación’ del último San Isidro por el jurado de Plaza 1 y mantiene su identidad. Es el mismo, pero con la confianza de ser el triunfador de la primera feria del mundo. Aún con la timidez risueña de ser uno de los nombres de la temporada taurina pese a su juventud, Ángel Téllez (Madrid, 1998) atiende a El Adelantado de manera previa al ‘mano a mano’ del viernes en Segovia, tras tentar en la ganadería de José Vázquez. “El cambio ha sido muy grande”, asegura; y reconoce: “He pasado de no tener nada a tenerlo todo; de que no me conociera la gente a estar en boca de todo el mundo”.
«Antes llamábamos para ver si nos ponían y pocos tenían hueco para mí, algo normal; y ahora hay ofertas muy bonitas»
El teléfono de este joven diestro criado en Mora (Toledo) suena, y cada vez más. “Antes llamábamos para ver si nos ponían y pocos tenían hueco para mí, algo normal; y ahora hay ofertas muy bonitas”, explica Téllez. Ver cómo una marea de brazos lo sacaban por la calle Alcalá no fue casualidad. “Fue increíble”, revive con recuerdo grato; y continúa: “Es algo que veía inalcanzable y, una vez que lo tienes, lo vives desde la incredulidad. Lo que tengo claro que esta recompensa es fruto de la preparación que he llevado”.
Su agenda va sumando contratos y mira a sus próximos compromisos con la confianza del triunfador, en un caso de eclosión poco frecuente que evidencia el periplo que atraviesan los novilleros en los últimos años: llamar la atención primero en Madrid para torear en otras plazas cuando antes era al revés. Triunfar en la primera plaza del mundo con menos de una veintena de festejos en el escalafón superior resulta todavía más difícil.
«El que más expectativas tiene en Ángel Téllez soy yo mismo»
“Llegué a Madrid con un corto bagaje dentro de una corrida de Araúz de Robles y gracias a esa tarde pude volver diez días después para sustituir al maestro Emilio de Justo. Las buenas sensaciones de la primera tarde fueron el devenir de lo que pude culminar después”, rememora. Consciente de que ahora el público va a exigirle más, Téllez responde con ambición y serenidad: “La exigencia es algo que normalizo, ya que ven que es algo que tengo que sacar y eso me motiva. Este es el sitio que siempre he soñado y el que más expectativas tiene en Ángel Téllez soy yo mismo”.
«En Segovia fueron los primeros que quisieron contar conmigo después del triunfo deSan Isidro»
¿Su techo? “Eso no lo sé, pero quiero seguir evolucionando y verme anunciado en carteles como el de Segovia con un compañero como Daniel Luque y una ganadería como José Luis Pereda”. Ahora llega a una plaza en la que hará su debut, pero una provincia en la que ya hizo el paseíllo en localidades como El Espinar o Cuéllar durante su etapa como novillero. “Guardo muy buen recuerdo de las plazas segovianas, donde en la mayoría triunfé. Por eso, me hacía especial ilusión que Segovia capital fuera la primera corrida después de Madrid -aunque toreó el domingo en Torrejón de Ardoz (Madrid) vía sustitución-. Además, fueron los primeros que quisieron contar conmigo y es un coso bonito”, subraya el de Mora.
Un día después a este torero que se define de corte “puro y clásico” le espera la semifinal de la Copa ‘Chenel’ en Las Rozas de Puerto Real (Madrid). “Son dos días en los que tengo que estar al máximo nivel y en los que quiero mostrar el torero que quiero ser”. Después, la confianza del ‘triunfador’ continúa proyectándose en Valencia y en cosos franceses como Mont-de-Marsan, Saint-Gilles o Bayona.