Los bueyes se situaron en el centro de la Plaza Mayor de Villacastín en torno a las 13 horas. / Miguel Ángel Fernández

La cuarta edición de la feria Trashumancia de Bueyes en Villacastín, que organiza la Asociación de Caballistas local con el patrocinio del Ayuntamiento, ha sido nuevamente una oportunidad para recordar un oficio tan antiguo como bonito, el de pastor trashumante, y dar a conocer, para que no queden en el olvido y se mantengan, las cañadas, veredas y caminos del municipio por donde hasta hace solo unas décadas se llevaba a cabo el traslado de ganado en busca de dehesas con mejores pastos en función del clima de invierno y verano en las regiones españolas.

En esta ocasión, al igual que ocurrió el 21 de enero, con motivo de las fiestas del patrón, San Sebastián, los bueyes, conducidos a caballo por un nutrido grupo de jinetes, han entrado hoy sábado en el pueblo en torno alas 13 horas, con parada en la Plaza Mayor, que fue escenario del resto de actos lúdicos, entre los cuales sobresalió una paella popular a partir de las 15 horas y un concierto por la tarde a cargo del grupo Cambalache, además del sorteo de un jamón y varios regalos para los participantes.

Villacastín recuerda el oficio de pastor trashumante de ganado
La comitiva trashumante hizo un recorrido por los parajes de la sierra que comenzó a las 10 horas. / Miguel Ángel Fernández