
La villa de Aguilafuente conmemora con una serie de acciones la celebración del Sínodo de Aguilafuente que tuvo lugar del 1 al 10 de junio de 1472. Hace 550 años, este pueblo enclavado en el centro de la provincia pasó a la historia por un sínodo diocesano cuyas actas se convirtieron en el primer libro impreso en España. El Ayuntamiento de Aguilafuente, a través de la Concejalía de Cultura y Turismo, lanza una serie de acciones este mes de junio para poner en valor y divulgar el Sínodo.
Hasta el 10 de junio, se publicarán a través de las diferentes redes sociales de los espacios culturales de Aguilafuente noticias sobre personajes y hechos que acontecieron en este sínodo y en especial la impronta que dejó en la iglesia de Santa María, modificada tras su celebración y donde quedó impregnado su reflejo.
Para un conocimiento más profundo, los sábados 4 y 11 de junio a las 12.30 horas, y los domingos 5 y 12 de junio, a las 11.30 horas, se desarrollarán visitas guiadas a la iglesia de Santa María, escenario del sínodo, con un coste de un euro por visitante, para posteriormente conocer la réplica de una imprenta, como la que utilizó Juan Párix, en el Ayuntamiento.
Estos actos pretenden ser la antesala del famoso Sinodal de Aguilafuente, una fiesta de recreación histórica en la que se representan diferentes obras teatrales que nos retrotraen al Aguilafuente de hace 550 años. En esta próxima edición, en la que se cumplen veinte años de la fiesta y que se celebrará del 5 al 7 de agosto, con actos como un certamen de teatro de calle.
Convocado por el obispo Juan Arias Dávila, gran mecenas y bibliófilo influido por la incipiente cultura del Renacimiento, es el inicio de la reforma del clero en la diócesis, con una clara preocupación por su formación. Y fue el propio prelado el que trajo a Segovia en el mismo año de 1472 al impresor alemán Juan Párix, al que entregó las actas de este sínodo de Aguilafuente, convirtiéndose así en el primer libro impreso en España.