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Los bisontes, en la provincia. /N.LL.

La provincia de Segovia cuenta con bisontes europeos llegados hoy a sendas fincas que se sitúan en los términos municipales de El Cubillo y Lastras de Cuéllar. Desde ayer acogen a nueve ejemplares de este bóvido, que se suman a una pareja que se trajo el pasado mes de diciembre a modo de prueba. En total, la provincia cuenta con once bisontes (ocho hembras y tres machos), que ya están mostrando su capacidad de adaptación al nuevo hábitat, y con los que se reforzará la continuidad especie, declarada en peligro de extinción.

En Los Porretales (Lastras de Cuéllar), bañada por el río Cega, se liberaron ayer cinco animales, tres hembras y un macho. En la de Matarrosueros (El Cubillo) pastan ya los seis restantes: cuatro hembras y dos machos. Estos últimos pueden llegar a superar los mil kilogramos de peso cuando sean adultos.

El proyecto ha supuesto alrededor de 40.000 euros y ha contado con la colaboración del Ministerio de Medio Ambiente de Polonia, país del que proceden los animales.

Según explicó Fernando Morán, del centro de conservación del bisonte, Castilla y León es un espacio idóneo para esta especie, que también está presente ya en Asturias, Extremadura o los Pirineos. Dentro del territorio regional hay once bisontes en el Museo de la Fauna Salvaje, de León; tres en un monte de Riaño; siete en el proyecto Paleolítico Vivo, cerca de Burgos; y otros doce en la primera reserva que se estableció, en San Cebrián de Mudá (Palencia). De los once animales traídos a Segovia, las hembras fueron recogidas del monte libre, mientras que los machos llegan de centros de cría. En total, en España se ronda ya el centenar de ejemplares, repartidos en 18 puntos, entre los que se cuentan zoológicos.

Los animales de Segovia podrán contemplarse en semilibertad a través de visitas organizadas que realiza la empresa Safari Ibérico Segovia en la finca donde tiene su sede la Yeguada La Perla.

Entre los primeros visitantes de ayer se encontraba el biólogo Juan Delibes, que hizo de padrino del desembarco, y quien destacó la belleza de estos animales, su capacidad de adaptación, y los beneficios que tienen para el medio boscoso, puesto que se alimentan, además de pasto, de madera seca, contribuyendo así a la limpieza del monte.