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Torre de la iglesia parroquial dedicada a San Julián, de Ortigosa del Monte, al fondo. / José Antonio Santos

Dicen que su nombre proviene de algo tan simple como que, cuando sus repobladores, que seguramente vinieron desde Sierra de Cameros en La Rioja, llegaron a este lugar, encontraron una gran cantidad de Ortigas, una planta de la familia de las urticáceas que, con su simple roce, produce un efecto urticante muy conocido por todos.

Ortigosa del Monte se encuentra a tan solo 14 km de Segovia capital, en la vertiente segoviana de la Sierra de Guadarrama. En el siglo XIII se conocía con el nombre de Ortigosiella, en diminutivo, porque entonces hacía referencia a una pequeña aldea pero, en el siglo XVI, ya aparece con su actual nombre.

Este pueblo ha vivido un importante proceso de transformación en los últimos años a causa de su ubicación entre Madrid y Segovia, lo que ha hecho que no pocos matrimonios jóvenes, residan en el pueblo y trabajen fuera de él: Durante el día trabajan en Madrid o Segovia y regresan, por la tarde, para disfrutar de la tranquilidad.

Esta situación ha hecho que creciera de forma más que evidente el número de viviendas construidas y que aumentara su población pasando, por ejemplo, de los 377 habitantes de 2001 a los 562 habitantes en 2017. Por poner otro ejemplo de su evidente crecimiento, su escuela pública estuvo a un paso de cerrarse hace unos 10 años pero, con el aumento de población, ha sido necesaria su ampliación…

Con la ampliación y expansión de la localidad y su población, la vida en el pueblo se ha visto también afectada y, actualmente cuenta con nuevos servicios como una Residencia de Ancianos o grandes industrias como Bezoya.

Agua Bezoya es una marca conocida a nivel nacional. Es de mineralización muy débil, está indicada en dietas pobres en sodio y en la preparación de alimentos infantiles y es rica en bicarbonato. Su manantial fue adquirido en el año 1974 por un segoviano, Tomás Pascual que, después de un tiempo y con el éxito de su agua mineral, construyó un grupo empresarial en el que el agua, por de su gran calidad, es uno de los principales exponentes.

Patrimonio

En Ortigosa del Monte destaca su iglesia Parroquial dedicada a San Julián, que pese a ser originalmente románica, en este momento solo quedan una sencilla cabecera y los capiteles de su arco triunfal que comunican la nave. Estos detalles permiten datar la construcción de la iglesia original en el siglo XIII.

Tras muchas restauraciones y cambios, esta iglesia, a lo largo de los años, ha pasado casi por completo a ser un edificio gótico, de principios del siglo XVI, en cuyo interior destaca un púlpito de piedra y el retablo mayor, realizado por Francisco Sancho en el siglo XVII.

En esta localidad, ubicada junto a la Cañada Real Soriana y con tradición de “paso ganadero” existe una Casa del Esquileo que cuenta con su escudo y, junto al pueblo, se encuentra El Berrocal, paraje con gran belleza por “sus Bolos de Granito”.

El Berrocal comienza en Ortigosa del Monte por el camino de Fuentemilanos y es un espacio lleno de Bolos o Tolmos, término utilizado en la toponimia para referirse a los bloques de granito con formas caprichosas que, como en este lugar, forman un paisaje especial. De este lugar, se dice, se extrajo piedra para el Acueducto y, por este lugar, se puede realizar senderismo o rutas a caballo en medio de una naturaleza única.

Pero no se puede olvidar, hablando de patrimonio en el municipio de Ortigosa del Monte, su entorno natural. En Ortigosa del Monte, el 85% de su entorno natural está protegido.

Fiestas

En este apartado Ortigosa del Monte tiene dos fiestas principales. En agosto celebran la festividad de Nuestra Señora del Rosario y, en enero, su fiesta patronal, San Julián.
ortigosa del monte hoy. Juan Carlos Cabrejas Mínguez (IND), alcalde de Ortigosa del Monte desde 2015, comenta a la hora de hablar de la forma de vida de los vecinos del pueblo que, ahora mismo, el turismo y Agua Bezoya, son las actividades que están “dando de comer”, dando futuro a Ortigosa del Monte.

Al hablar del patrimonio de Ortigosa del Monte, Juan Carlos Cabrejas cuenta que el Ayuntamiento pretende “poner en valor” la cantera romana y, para ello, cuentan con un proyecto en El Berrocal, que es una zona “muy bonita del pueblo” pero, para que esto sea posible, primero tienen que contar con las ayudas que puedan recibir de la Diputación, la Junta de Castilla y León o de quien les “pueda echar una mano” porque el Ayuntamiento no puede hacerlo en solitario.

La actuación que este Ayuntamiento pretende realizar en este lugar, consiste en una prospección para saber de forma concreta que “hay allí y organizar unas rutas, una señalización que permita que la gente que viene a verlo pueda tener información de lo que hay, de cómo se trabajaba, como se desarrollaba la actividad minera en aquel tiempo cuando salió el granito con el que se construyó el Acueducto de Segovia y, que se sepa que es lo que había allí y cómo funcionaba hace 2000 años…” También se estaría pensando en crear un museo en el que se recogiera la historia de esta zona y su actividad…

El Ayuntamiento de la localidad, que en estos días está ocupado en la preparación para la aprobación de sus presupuestos, seguirá con las subvenciones y ayudas para actividades diversas. Está realizando una obra en el gimnasio o pequeño polideportivo, el consultorio médico ya está en marcha y, quieren mejorar el parque de juegos infantiles… “Pero dependemos de las ayudas que nos den” .

Dónde dormir

En Ortigosa del Monte existen varias posibilidades a la hora de poder descansar y disfrutar de la tranquilidad de una población rural ubicada a pocos kilómetros de Segovia capital. Entre estas oportunidades encontramos las siguientes casas rurales:

— La Casa del Molino, con una capacidad de hasta 20 personas. En el exterior encontramos jardín, barbacoa y piscina y, en el interior, las habitaciones tienen cuarto de baño y televisión y el salón tiene chimenea. Se encuentra a las afueras y se sirven desayunos y comidas.

— Casa Rural El Pinar de Ortigosa: con capacidad para 9 personas. Dispone de jardín con barbacoa y piscina en el exterior y televisión en las habitaciones, chimenea, acceso a internet y todas las comodidades. Esta Casa Rural se ubica en una casa de campo con un jardín de más de 2000 metros cuadrados y un porche de 20 metros.

— La Becea Casa Rural, hasta 12 plazas de capacidad. Con jardín, barbacoa, terraza y todas las comodidades. Se sirven cenas y admite animales de compañía. Un lugar ideal si se busca un lugar tranquilo o si se quiere practicar el senderismo, bicicleta de montaña o actividades de aventura.

— Villa El Berrocal, hasta 20 plazas de capacidad. Dispone de jardín, barbacoa y piscina, en el exterior y, acceso a internet y chimenea.

— Las Casas de la Venta Vieja, hasta 20 plazas. Con jardín, barbacoa y terraza y, chimenea, jacuzzi y todas las comodidades. Se sirven comidas y cenas y, se dispone de canguro.

— Las Casas del Palomar, hasta 12 plazas. En el exterior encontramos jardín con terraza y barbacoa y, en el interior tiene chimenea, todas las comodidades y admite animales.

Dónde comer

En esta localidad destacan los establecimientos donde podemos disfrutar de la gastronomía tradicional de esta tierra y, entre ellos el Horno de Asar La Venta Vieja, que se encuentra en la carretera nacional 603 y, destaca por su decoración rústica y su cordero asado pero también por sus carnes en general y sus guisos tradicionales.

Restaurante La Becea, con un menú más que interesante, tanto desde el punto de vista de los platos que lo componen como de su precio. La Becea destaca por ser “Una Casa de Comidas”, donde lo que vamos a encontrar son los platos “de toda la vida”.

Junto a estos restaurantes, en Ortigosa del Monte encontramos otros establecimientos como el bar El Berrocal, con cafetería y comida casera. El bar Antonio y el chiringuito de las Pistas Polideportivas, especializado en comida marroquí y, sobre todo en su Tajine, del que dicen los vecinos que es espectacular.

Receta

Como siempre, también en Ortigosa del Monte los fogones se han puesto en movimiento para ofrecernos la posibilidad de recorrer la provincia a través de la maestría de sus vecinos. En Ortigosa del Monte, desde hace 12 años se puso en marcha el concurso «La Cuchara de Oro», organizado por la Asociación Juvenil Alerce de Madrid y, en algunas ocasiones, el concurso se ha desarrollado en Ortigosa del Monte para facilitar la participación en él de los segovianos. Los participantes reciben clase de cocina desde el mes de septiembre y en el mes de marzo se presentan al concurso, organizado por el Club Molino en colaboración con el Club Pinoalto (Segovia) y el Club familiar El Soto (Soto del Real) de Madrid.

Este año han participado 20 niñas provenientes de Ortigosa del Monte, Segovia, Soto del Real y Colmenar Viejo. En la gala final, presentada por la actriz y cantante Miriam Fernández, el jurado, del que formaban parte el alcalde de Ortigosa del Monte, Juan Carlos Cabrejas y Luis Miguel Benito, copresentador del programa Saber Vivir, dieron diversos premios a las representantes locales:l primer premio de la categoría junior a Paula Agraz, tercer premio de la misma categoría a Daniela Martín o, la mención especial en la categoría chef a Isabella Dalla Valle.

La ganadora de la edición de este año 2018, hace tan solo unos días, Paula Agraz Pérez, de 9 años, ha sido la encargada de ofrecernos la receta que le ha valido ganar el concurso: La tarta de queso con frutos rojos al estilo casero

Ingredientes: galletas maría, mantequilla, queso de untar (tipo philadelfia), nata, mermelada de algún fruto rojo como frambuesas, leche, sobre de cuajada, azúcar, limón, frutas rojas (fresas, arándanos, frambuesas… también puede llevar moras si es la época).

Modo de prepararlo: se prepara una base para la tarta con galletas maría, machacadas, y mantequilla fundida. Estos ingredientes se mezclan, se ponen en un molde y se meten el frigorífico. Se calienta el queso tipo philadelfia con un poco de nata y azúcar y, a la vez, en un vaso de leche se diluye un sobre de cuajada. Cuando el queso, la nata y el azúcar están calientes y antes de que la mezcla comience a hervir, se añade la leche con la cuajada, se mezcla todo bien y se deja reposar y enfriar. Después de que pasen un par de horas, cuando todo está frio se va montando la tarta (la base, sobre ella el queso con nata…) y se pone por encima la mermelada a la que se añade el zumo de un limón para que no esté tan dulce. Para terminar se decora con las frutas frescas. Una receta muy sencilla que da como resultado una tarta que «está muy buena».

A sus 9 años, Paula Agraz, es una joven de Ortigosa del Monte que, dicho por su madre, es «todoterreno» porque también juega al futbol, al tenis y hace un cursillo de cocina en el colegio, que un día a la semana, en el comedor, hacen recetas y es muy colaboradora.