
El Colectivo Azálvaro, ONG ambientalista de El Espinar, ha emprendido una campaña junto con otras asociaciones para realizar movilizaciones en Ávila y Madrid para alegar contra el proyecto de construcción de un nuevo megaparque eólico en la Sierra de Guadarrama.
Un proyecto con 19 megaaerogeneradores de 200 metros de altura, —con una altura de buje de 115 metros y un diámetro de rotor de 170 metros—, que se tramita en una zona de alto valor medioambiental, paisajístico y patrimonial del término municipal de Peguerinos, en Ávila. Esta provincia vecina cuenta en la actualidad con más de 300 aerogeneradores distribuidos en 16 parques, el 70% de los cuales se concentra en torno a este nuevo emplazamiento.
La ubicación del parque eólico en el Guadarrama occidental (Sierra de Malagón), en zonas naturales con alto valor por la presencia de hábitats y especies de aves y murciélagos, y áreas prioritarias de reproducción, alimentación, dispersión y concentración de especies amenazadas, presenta también un alto impacto paisajístico, según el colectivo Azávaro.
Además, la instalación se proyecta junto al Parque Natural Sierra de Guadarrama y al espacio protegido Red Natura 2000 ZEPA ‘Campo Azálvaro-Pinares de Pinares de Peguerinos’ y la línea atraviesa espacios Red Natura 2000 de la Comunidad de Madrid.
Circunstancias que hacen necesario que el proyecto conlleve una declaración de impacto ambiental desfavorable a la creación del parque eólico y la línea eléctrica.
“La proliferación de instalaciones eólicas existente en esta zona de alta sensibilidad ambiental en torno a ellos se ha identificado como un factor de presión y amenaza derivado de la afección por colisiones con la avifauna y quirópteros, sea en los propios parques o en las líneas de evacuación, así como por el punto de alta concentración que constituye el vaso de vertido de residuos del Centro de Tratamiento de Residuos (CTR) Ávila Norte”, según informa José Aguilera presidente del Colectivo Azálvaro.
Argumentan que la zona donde se proyecta el parque eólico juega un papel vital en el mantenimiento de la conectividad por la Sierra de Guadarrama, así como de los procesos ecológicos existentes, dando cobijo a una importante fauna de excepcional valor, con alguna de las especies más emblemáticas de la península Ibérica como el águila imperial ibérica, el buitre negro o el milano real.
Contra el parque eólico
Ante esta nueva megainstalación eólica se alzan diferentes colectivos, organizaciones ambientales, asociaciones, comunidades locales y ayuntamientos que persiguen los mismos fines de defensa de la biodiversidad y del paisaje de la Sierra de Guadarrama. Sostienen que lo que se acepta como energía limpia puede causar graves daños medioambientales en la biodiversidad. La iniciativa colectiva ha lanzado una campaña de crowdfunding, cuyo objetivo es la dotación de un fondo económico para promover acciones de sensibilización y legales en defensa de la biodiversidad y del paisaje de la Sierra de Guadarrama y su entorno ante este proyecto.
La construcción de estos parques eólicos, tiene un mayor impacto sobre la biodiversidad y el paisaje por su gran tamaño y la necesidad de grandes infraestructuras asociadas, como líneas eléctricas y las pistas de acceso. Nuria Blázquez, de Ecologistas en Acción de Ávila señala que “se puede y se debe incrementar la producción de renovables, pero no a costa de destrozar el territorio, la biodiversidad y las posibilidades de desarrollo sostenible en comarcas enteras”. Por ello hay que apostar por modelos de energía distribuida de bajo impacto y más cercanas al usuario final.