Los cuarteles se encuentran en obras de mejora, reforma y rehabilitación desde hace meses por lo que han sido “desalojadas un total de aproximadamente cuarenta familias”, apuntaron. Sin embargo, las obras se han demorado ya que estaba previsto que finalizasen a principios de año, por lo que las familias “han tenido que verse en la obligación de alquilar viviendas particulares en las que poder alojarse, encontrándose actualmente con que dichas viviendas deben ser entregadas a sus propietarios a finales del presente mes de mayo con la finalidad de alquilarlas nuevamente”, denuncian.
Por su parte, la subdelegada del Gobierno en Segovia, María Teresa Rodrigo Rojo, señaló que cualquier tipo de obra conlleva molestias “pero se están tomando todas las medidas oportunas para que sean mínimas”, explicó a la vez que apuntó que desde la Subdelegación y de la Comandancia de la Guardia Civil de Segovia se intenta reubicar a los agentes en otros cuarteles próximos para evitar que tengan que alquilar viviendas.
Además de recordar que muchas de estas obras están a punto de finalizar y otras se han presentado ya, Rodrigo Rojo agregó que el Ministerio ha hecho “un esfuerzo inversor importante que mejora las condiciones en las que vivían y en las que van a vivir”. “Muchos cuarteles no estaban en condiciones de habitabilidad y con estos trabajos mejorarán mucho”, agregó.