Volvió Barcial y la gente mostró su afición a los toros. Eso es Riaza. Pese a la mansada que echó la divisa salmantina el sábado pasado, la respuesta del respetable fue digna de reconocimiento. El arte trilero de colar un 2×1 a una afición tan exigente se vio traducido en la vara de medir. Lo mejor, que a poco iba a salir mejor. Sin expectativas, en esta ocasión los novillos se dejaron más, siendo nobles tercero y cuarto, aunque también les hubo faltos de casta. Destacó el arrojo novilleril del salmantino Jesús de la Calzada, que cortó una oreja, y el concepto estético del segoviano Pablo Atienza en en el segundo de su lote. Dispuesto estuvo el sepulvedano Eusebio Fernández, en una tarde en la que no dio tiempo a que se hiciera de noche: en 50 minutos, paseíllo incluido, se llegó al ecuador.
Inédito quedó Atienza con el primero de Barcial, un manso que recordó a los que el hierro salmantino echó anteriormente en este mismo coso. El segoviano intentó sujetarlo con la muleta, pero la falta de casta del animal imposibilitó que aflorara algún pase. Un saldo de outlet. Daba para una dormifestación. Pudo poner en liza su concepto puro, siempre cuidando la estética, con el segundo de su lote, un astado bien hecho que salía suelto de las suertes pero que tuvo buen comportamiento, sobre todo por el pitón derecho. Ahí se gustó el de Segovia, con pases de alto calibre. Buena actuación de Atienza, que quedó mermada con el uso de los aceros y su labor quedó en ovación.
Abierto de cuerna, negro lucero y calcetero fue el segundo novillo de la tarde, que salió por lo menos un tanto complicado para salir del encasillamiento de la sosería que la ganadería había mostrado hasta el momento. Difícil en banderillas, en la muleta pronto se quedó cortó, fruto de su escasa raza, y evidenció que no era un animal para el toreo. Dispuesto Fernández, no tuvo lugar a lucimiento. Las ganas del sepulvedano fueron reconocidas con una ovación. Más cómodo estuvo con el quinto, que tuvo destellos de novillo noble, y el novillero del nordeste pudo dejar algún muletazo entonado, sin terminar de conjuntar la faena y dio una vuelta al ruedo.
En novillero se presentó De la Calzada. Firme con el capote, fue abriendo el camino al primero de su lote. Intentó siempre llevarlo largo, pulseando la embestida bronca del ejemplar de Barcial, que se dejó aún embistiendo de forma imprecisa pero que cuando metió la cara lo hizo con nobleza. El salmantino firmó una entregada faena y cortó una oreja. El más grande fue el que cerró la tarde, el ‘más toro’, con el que De la Calzada volvió a ofrecer una buena impresión, a pesar de que le costó un poco más y no pudo redondear la tarde; siendo su actuación finalmente silenciada. Terminó la novillada, con mejores sensaciones que la corrida del sábado pero sin ser buena.
Ficha
Plaza de toros de Riaza. Sexto festejo de la feria de la Virgen del Manto y Hontanares. Alrededor de tres cuartos de entrada. Novillos-toros de Barcial, bien presentados y de pobre juego en líneas generales.
Pablo Atienza, silencio y ovación.
Eusebio Fernández, ovación y vuelta al ruedo.
Jesús de la Calzada, oreja con petición de la segunda y silencio.
La de Valdellán, a las 18.00
La feria taurina de Riaza pone su broche final este sábado con una corrida de la ganadería de Valdellán, encaste Santa Coloma, para Javier Cortés, Fernando Adrián y Román, que da comienzo a las 18.00 -media hora más tarde de lo habitual- al ser retransmitida en directo por las cámaras de Telemadrid.