
A 79 km de Segovia, con 37 habitantes censados y a más de 900 metros sobre el nivel del mar, se encuentra la pequeña localidad de Calabazas de Fuentidueña. Este pequeño pueblo, linda con localidades como Fuentesauco de Fuentidueña, Vivar de Fuentidueña, Aldeasoña, Sacramenia, Valles de Fuentidueña, Valtiendas. Su ubicación es estratégica, se encuentra a 27 km de Peñafiel (Valladolid) y a 45 Km de Aranda de Duero (Burgos).
En el año 1247, esta localidad aparece nombrada como Calabaças en el plan de distribución de rentas en el Cabildo Catedralicio de Segovia. El origen de este nombre puede hacer referencia a un cultivo o a la localidad de la que procedían los primeros pobladores procedentes del Norte del Duero.
La población de la localidad ha tenido un importante descenso, sobre todo en los años 60 y 70 del pasado siglo, a causa del éxodo rural cuando un buen número de habitantes de la zona trasladaron su residencia a grandes ciudades, sobre todo a Madrid y Valladolid. Hoy, en Calabazas de Fuentidueña, se observa que su población oscila dependiendo de los diferentes momentos del año. Por un lado, cuando se ponen a punto los huertos que encontramos en la localidad o hay que recoger la cosecha pero, por otro, en los periodos vacacionales, cuando debido al arraigo con el pueblo, se sigue notando mayor afluencia de visitantes.
Calabazas de Fuentidueña se encuentra cerca de Valtiendas y, como en toda la Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña, sigue existiendo una importante tradición en relación al vino.
Actualmente no hay un gran número de viñas pero hay muchos vecinos del pueblo que, o cultivan su propia uva o la compran por la zona y, en sus bodegas, soterradas como es habitual en esta zona de la provincia, hacen su propio vino de cosecha manteniendo la tradición, las bodegas y la costumbre de dedicar estos espacios subterráneos al ocio y a las reuniones con amigos.
No todos pueden mantener hoy las viñas pero, los que no, no tienen por qué renunciar a hacer su propio vino. Compran una cantidad determinada de uva en la zona de Valtiendas y, cuando llegan las fechas apropiadas, ellos mismos realizan su propia vendimia. Con esa uva, en sus lagares, realizan su propio vino de cosecha.
Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña
Calabazas de Fuentidueña pertenece a la Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña, institución política castellana que, entre los siglo XI y XII, organizó la repoblación cristiana de la zona como, en su conjunto, las 42 Comunidades de Villa y Tierra existentes. Estas Comunidades repoblaron las tierras al sur del Duero, la Extremadura Castellana, desde el Sistema Central hasta los ríos Tajo y Guadiana.
La Comunidad de Villa y Tierra, se configura como un Estado de Derecho que se gobierna democráticamente, donde los oficios destinados a la justicia y el gobierno, jueces y alcaldes, se nombraban por elección popular.
La Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña se encuentra en el extremo nororiental de la provincia de Segovia, contando con 21 pueblos y una población de 2.525 habitantes (año 2010) que marca una pirámide invertida en la que el 50% de sus habitantes tiene más de 60 años, dato muy común en el mundo rural hoy.
Actualmente, las distintas Comunidades y, concretamente la de Fuentidueña, han cambiado su forma de actuar y, los 21 pueblos que la componen, invierten los beneficios que obtienen de las diferentes propiedades comunales en dar los servicios necesarios para que la población pueda vivir con más calidad de vida y de modo más sencillo. Para ello, la Comunidad asume servicios como la recogida de residuos y pone a disposición de los ayuntamientos, la maquinaria necesaria para la realización de diferentes funciones o trabajos.
Por otro lado y, ante el cambio en las forma de vida y las costumbres, en el año 2005, se dio un paso más y se creó la Agencia de Desarrollo Local, desde la que se trabaja en conseguir proyectos turísticos, de formación, documentación…
Patrimonio
La Comunidad de Villa y Tierra de Fuentidueña es un espacio especialmente interesante, desde un punto de vista arquitectónico, en la provincia de Segovia. Concretamente, en Calabazas de Fuentidueña nos encontramos con la iglesia parroquial de Nuestra Señora de la Asunción de María.
Esta iglesia está orientada al este, situada en un pequeño montículo que domina todo el pueblo, debió construirse sobre otra iglesia. Su portada, plateresca, perteneció al Convento de San Juan de la Penitenciaría de Fuentidueña y en ella, se observan dos escudos de armas de los Mendoza y Luna (Álvaro de Luna), ambos fundadores en el siglo XVI del Hospital de la Magdalena de Fuentidueña, por lo que se piensa que la fachada puede pertenecer a este hospital, hoy en ruinas, en esta localidad de Fuentidueña. Para acceder a este imponente templo, con un tamaño muy superior a lo que sería normal en un pueblo de la dimensión de Calabazas de Fuentidueña, hay que hacerlo a través de una escalinata que sube por el cerro.
Una de las características más especiales de este templo son su Sargas, grandes lienzos pintados con imágenes de la Pasión de Cristo. Antiguamente, en Calabazas de Fuentidueña y en otros pueblos de la provincia que también poseen estas obras de arte, los instalaban tapando los altares mayores durante la Semana Santa. En esta localidad, para que no se estropearan, decidieron extenderlos permanentemente y, desde hace tiempo se encuentran colgados de la balaustrada del coro.
A la salida del pueblo hacia Fuentidueña, encontramos otro pequeño templo, bien conservado, la ermita de San Roque.
También, en Calabazas de Fuentidueña, cuentan con un paseo, el Camino del Vivar, un camino que llega hasta la Fuente del Cuadro, un manantial natural ubicado en una zona con árboles. Un lugar muy agradable.
Fiestas
Las fiestas principales en esta localidad son el 4 de julio, Santa Isabel; el 15 de agosto, Nuestra Señora de la Asunción y, 16 de agosto, San Roque pero esta, su fiesta grande, la celebran unos días antes, el segundo fin de semana de agosto, este año, concretamente está previsto que se celebre los días 8 y 9 de agosto.
Calabazas de Fuentidueña hoy
La alcaldesa de Calabazas de Fuentidueña desde el año 2011 es Francisca Jurado (PP) y, los vecinos de la localidad se dedican preferentemente a la agricultura y no hay otro tipo de empresas salvo una casa rural. La alcaldesa comenta que cuentan con una asociación cultural llamada “Todo es Ponerse”, en la que participa todo el pueblo. Esta asociación gestiona el bar o casa cultural que se encuentra cerca de la plaza del pueblo. En este lugar ellos mismos se sirven, pagan… y es el único establecimiento en el que se puede disfrutar de un refresco y del tiempo de ocio con la familia y amigos.
Entre las obras previstas para realizar próximamente, Francisca Jurado comenta que piensa realizar unas pérgolas de obra para quitar el sol en la zona de la plaza donde los vecinos se reúnen a jugar a las cartas o a charlar.
En este lugar, junto a la plaza, existe un lavadero y cerca está la casa cultural. El pasado año comenzó la mejora de este punto del pueblo con una ampliación, para que puedan reunirse un mayor número de vecinos, se pusieron bancos de piedra y se arregló el asfalto. Ahora se añadirán las pérgolas para que este rincón quede más agradable.
En Calabazas de Fuentidueña como personaje ilustre de la localidad, nos encontramos el nombre de Daniel Miguel San José, catedrático de Química Inorgánica y rector de la Universidad de Valladolid. Ocupó el Rectorado hasta el año 2018.
La alcaldesa, al hablarnos del pueblo nos recordó que antes de que surgiera la pandemia del Coronavirus, un grupo de vecinos de Calabazas de Fuentidueña, pusieron en marcha una iniciativa que consistió en plantar árboles y otras plantas en diferentes rincones del pueblo. Eran unas 120 personas y comenzaron la jornada con una comida campestre para luego dedicarse a plantar árboles por el pueblo. Esta iniciativa, que ya se conoce como “Día del Árbol”, solo se ha puesto en marcha una vez, de momento, pero ha nacido con la intención de marcar una continuidad y que se incluya en la agenda de actividades de Calabazas de Fuentiduaña un año tras otro.
Por último, como ya sabemos, en Calabazas de Fuentidueña existe una casa rural: “La morada del Cura”, con capacidad para 14 personas, terraza, barbacoa, chimenea, acceso a internet y admite animales de compañía. “La morada del cura” es una casa rústica de tres plantas, que se construyó en 1932 como vivienda parroquial.
Asociación Nacional de Resineros
La alcaldesa de Calabazas de Fuentidueña, es resinera y presidenta de la Asociación Nacional de Resineros. Trabaja en los pinos de la Comunidad de Villa y Tierra, que se encuentran cerca de Navalilla, Torrecilla del Pinar, Fuente el Olmo…
La presidenta de la asociación nos cuenta que el sector en este momento va mal. Este año ha habido una bajada fuerte en el sector y el parón producido por la pandemia que sufrimos, lo ha puesto peor. Francisca Jurado insiste en que la resina es una baza importante en la vida del medio rural, esta actividad es muy beneficiosa para todo: Evita incendios y mantiene limpios los montes y da trabajo y vida a los pueblos. La provincia de Segovia es la que tiene más resineros de toda España.
La Asociación de Resineros lleva en funcionamiento siete años mientras, la alcaldesa de Calabazas de Fuentidueña lleva 11 años trabajando en este mundo aunque no proviene de una familia de este sector. Nos cuenta que ahora se encarga de 4 mil pinos y que este trabajo “es algo que te engancha”. La decisión de poner en marcha la asociación se debió a que es “un sector que no tenía nada, nadie ponía voz al resinero y es, muy importante, sobre todo por lo importante que es en Segovia esta tradición. Hay pueblos como Navas de Oro, Aguilafuente, Coca… donde nunca se ha dejado de resinar del todo”.
Francisca Jurado recordaba que durante la crisis se volvió al monte, al pinar porque “ser agricultor, no lo puede ser cualquiera por la importante inversión que requiere, o lo heredas o… pero, sin embargo, para un resinero, la inversión es baja y trae dinero a casa”.
La asociación representa a unos 300 resineros de toda España y, con la situación provocada por el Covid-19, a esta actividad se le ha incluido entre las esenciales y no ha parado su actividad pues, la resina se utiliza en cosmética y desinfectantes. Además, los resineros están ahora preparando los pinos. Si no se da este paso ahora, antes de mediados del mes de mayo, “perdemos toda la campaña”, como en el caso de los agricultores, si no siembran a tiempo…
La receta
La encargada de ofrecernos la receta de cocina desde Calabazas de Fuentidueña es Ma Victoria que aunque nació en Fuentidueña hace 78 años, vive en Calabazas desde que se casó.
Este dulce se realiza con mucha frecuencia en carnaval pero, como todos tenemos más tiempo, al estar confinados en casa, es un dulce fácil que podemos hacer. Y Mª Victoria ha decidido que esta es una receta fácil de hacer, para que los amantes de la repostería puedan lanzarse a prepararlo: Hojuelas.
Ingredientes: 1 vaso de aguardiente,1 vaso de aceite de oliva o girasol ( Mª Victoria prefiere el girasol) y 1 vaso de agua, 1 huevo bien batido y, la harina que pida la masa.
Modo de prepararlo: Se van mezclando bien todos los ingredientes hasta que queda una masa que se puede extender sobre un tablero o mesa, para que queden muy finas. Se fríen en aceite y, tras sacarlas de la sartén, se ponen sobre papel de cocina para eliminar todo el aceite sobrante y, ya en una fuente, se les pone por encima azúcar y miel.