Eres un ‘TXAKURRA’

Las redes sociales cobijan a ‘radicales’ que propagan las consignas de ETA El temor de los más tibios hace que solo haya foros y ‘muros’ en favor de la banda

Los resultados están ahí. Uno de cada cuatro vascos desea que PNV y EH Bildu formen Gobierno dentro de dos o tres meses -es la costumbre-, y que el futuro lehendakari, Íñigo Urkullu, que ya tiene el compromiso de los abertzales y del PSE-EE de no votar en su contra, tenga en su equipo a los hijos de HB, con su líder, Laura Mintegi, al frente. Ahora que los ánimos se han vuelto a encender con la detención en Francia de la dirigente radical Aurore Martin, bueno es saber cómo respira ese cuarto de millón largo de personas que dieron su voto a una formación que, hasta no hace mucho, al menos sus otras marcas, vivía en la más absoluta clandestinidad.

Pese a que hubo un ligero descenso con respecto a lo que cosechó Amaiur en las elecciones generales del año pasado -285.290 por 276.989-, contando el desgaste sufrido en los municipios que conquistaron en 2010, con San Sebastián a la cabeza, que han visto cómo las políticas desarrolladas al margen de lo estrictamente político han sido decepcionantes, con muchos proyectos paralizados y recortes que si los hubiese hecho el Gabinete Rajoy…

Este pequeño freno, cuya causa parece evidente, tiene otra lectura: el número de nuevos simpatizantes ha crecido y de modo importante, y ahí es donde las redes sociales tienen mucho que decir.

«Yo, la verdad, es que les di mi voto porque es el único partido que de verdad quiere la independencia. Yo me siento vasco, no español», asegura Raúl, al tiempo que deja muy claro que él siempre abominó la violencia y que ha sido la primera vez que apoya a los abertzales en las urnas. Y añade: «A pesar de que se han mostrado tibios en campaña con el tema de la secesión, yo valoro mucho que hayan sido capaces de dar el paso al frente y decirle que No a ETA. Hasta no hace mucho, había un enorme miedo en los pueblos, todos se conocían demasiado bien».

Desgraciadamente, la postura de este chico, que quiere que la banda asesina desaparezca de una vez y que se consolide ese utópico proceso de paz con reconciliación incluida, no coincide ni por asomo con la inmensa mayoría de los que, día a día, utilizan Facebook y Twitter para animarse unos a otros en el sueño de la independencia ante el opresor Estado español.

Tras varios meses metido en foros abertzales, así como en muros de las redes sociales, había una consigna que se repetía una y otra vez: Jo ta ke, irabazi arte, que en cristiano viene a decir: Dale fuerte hasta conseguirlo.

Estas palabras, transformadas en gritos junto a banderas que pedían la excarcelación de los presos, son objeto de análisis por parte de la Fiscalía de la Audiencia Nacional para determinar si Josu Uribetxeberria Bolinaga incurrió en un delito de exaltación del terrorismo en el recibimiento que le dieron el pasado 23 de octubre al llegar a su casa tras recibir el alta médica y el permiso del juez Castro para ir allí a morir en paz.

Ni qué decir tiene que el carcelero de Ortega Lara es tratado poco menos que de un santón en el ciberespacio, aunque no llega a desplazar al que denominan Mandela blanco, Arnaldo Otegi. También tienen su demonio: el PP… y el PNV, al que consideran traidor.

Con un porcentaje muy escaso de cibernautas se pudo tener una conversación más o menos distendida y democrática sobre la situación política en el País Vasco. De hecho, se llegó a dar algo muy extraño. Tras recibir una lluvia de insultos, txakurra -perro- incluido, una persona que había aparentado un enorme espíritu conciliador hasta entonces -y durante muchos días de charla regular-, se sumó a los radicales de Internet, llegando uno de ellos a mostrar links con páginas publicadas por el que firma.

Conviene recordar que la eurodiputada Teresa Jiménez Becerril recibió amenazas de muerte por parte de un tal kakakulo, que luego fue identificado y detenido. Como se puede ver, ETA trabaja y muy bien en zulos cibernéticos.