El expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a su salida del Tribunal Supremo tras declarar como testigo en el juicio del ‘procés’.
El expresidente del Gobierno, Mariano Rajoy, a su salida del Tribunal Supremo tras declarar como testigo en el juicio del ‘procés’. / EFE

El expresidente del Gobierno Mariano Rajoy inició su declaración ante el Tribunal Supremo como testigo en el juicio del ‘procés’ afirmando que “siempre” dejó claro en sus conversaciones con la Generalitat de Cataluña que “en ningún caso” negociaría sobre un referéndum de independencia. “Sobre el referéndum nunca hubo nada de qué hablar. Desde la primera reunión con Artur Mas dejé patente con meridiana claridad que en ningún caso el presidente del Gobierno de España iba a liquidar la soberanía nacional saltándose la Constitución”, dijo Rajoy en respuesta al abogado de la acusación popular de Vox, Javier Ortega Smith.

El exjefe del Ejecutivo incidió en esta idea subrayando que “ningún presidente del Gobierno de una democracia moderna como es España puede aceptar que alguien pretenda liquidar la legalidad vigente”, un hecho que Rajoy sitúa en la aprobación de las denominadas leyes de desconexión —ley de transitoriedad y ley de referéndum— que el Parlament aprobó el 6 y 7 de septiembre de 2017.

En su opinión, este fue un hecho “lamentable”, pues se “liquidó la legalidad vigente” y ante eso “ningún presidente puede mirar para otro lado”. Y entre las medidas adoptadas, Rajoy explicó la aplicación del artículo 155 de la Constitución. A la pregunta de si el Gobierno se planteó, aparte del 155, la aplicación del artículo 116 que regula los estados de alarma, excepción y sitio, el expresidente ha explicado que siempre pensó que el primero era “mucho más operativo” y también “más justo”, porque el segundo afecta a derechos fundamentales de las personas.

“Se trataba de cesar a un gobierno. Era una cuestión de respetar derechos individuales de las personas y, entre esto y cesar un gobierno, preferí tomar la decisión que tomé”, remarcó. Pero además de las decisiones políticas del Govern que llevaron a plantear al Senado la aplicación del 155, Rajoy resaltó que otro motivo que le llevó a tomar la decisión fue el clima de violencia en Cataluña.

Cuando fue preguntado por este asunto, dijo que tuvo conocimiento de esta “situación de excepcionalidad” porque también lo recogían así los medios de comunicación y fue “una de las razones” por las que empezó a buscar los apoyos necesarios.

Sobre el referéndum independentista del 1-O, el exjefe del Ejecutivo afirmó que él no considera que fuera un referéndum como tal, sino que sólo “se intentó”. Es más, recordó que la Junta Electoral Central acreditó tres días después de estos hechos que “no hubo ningún referéndum”.

Ortega Smith dirigió a Rajoy preguntas rápidas y precisas, empezando por si llegó a existir un “comité restringido” formado por PP, PSOE y la Generalitat presidida por Artur Mas en el año 2014 para hablar sobre el futuro de Cataluña.

Órganos

El expresidente dijo que no conoce ningún órgano así, aunque sí manifestó que “conversaciones entre miembros de la Generalitat y los partidos políticos ha habido siempre en la historia” porque “es algo usual en política”. “El problema es a qué se llega. Y sobre el referéndum nunca hubo nada de qué hablar porque ya dije con meridiana claridad que en ningún caso el presidente del Gobierno iba a liquidar la soberanía nacional”.

En este sentido, el expresidente del Gobierno responsabilizó a los líderes independentistas que promovieron el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 de las lesiones que sufrieron aquella jornada ciudadanos y funcionarios de las fuerzas y cuerpos de seguridad, durante su declaración como testigo en el juicio que se celebra en el Tribunal Supremo contra 12 de los líderes del ‘procés’.

“Realmente, si no se hubiera llamado a la gente a un referéndum ilegal y no se hubieran tomado decisiones quebrantando la legalidad vigente, ni usted ni yo ni nadie hubiésemos tenido que ver las lesiones que tuvieron algunas personas y miembros de las fuerzas y cuerpos de Segurdiad. Eso es lo importante”, señaló ante los medios.

Rajoy contestaba a preguntas del abogado de Oriol Junqueras y Raül Romeva, Andreu Van den Eynde, quien le planteaba si en aquella jornada “pudo ver en periódicos digitales o en la televisión las lesiones a los votantes” que participaron en la convocatoria. No obstante, la letrada de Jordi Cuixart, Marina Roig, también se ha interesado por este asunto y proyectó un vídeo en la sala mostrando cargas policiales y un herido hablando a cámara.

“Lamentablemente, imágenes como estas he visto muchas a lo largo de mi vida y hay otras que tendrían también interés” planteó Rajoy, para incidir en que “la responsabilidad de los dirigentes políticos está en evitar que se produzcan acontecimientos” como los que mostraba el vídeo porque “si se hubiera actuado cumpliendo la ley y si no se hubiera pretendido violentarla no se habrían visto ni estas imágenes ni otras”.

“Yo lamento muchísimo estas imágenes, no me gustan ni estas ni otras y por eso creo que la obligación que tenemos los dirigentes políticos es trabajar para que no se den las condiciones para que se den estas imágenes”, añadiño durante su comparecencia en el Supremo.

Soberanía

En este sentido, la dirección nacional del PP señaló ayer que el exjefe del Ejecutivo Mariano Rajoy dejó claro ante el Tribunal Supremo que la soberanía nacional no se negocia y que no aceptó ni intermediarios ni mediadores en medio de desafío independentista, según informaron a los medios de comunicación fuentes del partido. En su declaración como testigo en el juicio del ‘procés’ que se sigue en el Supremo, Rajoy afirmó que “siempre” dejó claro en sus conversaciones con la Generalitat de Cataluña que “en ningún caso” negociaría sobre un referéndum de independencia.

Además, Rajoy recalcó que “nunca” hubo mediador porque él aclaró que no aceptaría la ruptura de la soberanía. “Y sobre el referéndum nunca hubo nada de qué hablar porque ya dije con meridiana claridad que en ningún caso el presidente del Gobierno iba a liquidar la soberanía nacional”, abundó. El PP que dirige Pablo Casado puso el acento en esas declaraciones del exjefe del Ejecutivo. Según fuentes de la dirección nacional del partido, Rajoy dejó claro en su testimonio, como demostró en su mandato, que la soberanía española “no se negocia bajo ninguna condición ni presión”.

Según los ‘populares’, Rajoy recalcó en su testifical que la Constitución española y la voluntad de todos los españoles están “por encima de todo”. Además, destacó que el expresidente ha lanzado “un claro mensaje: no aceptó ni mediadores ni intermediarios”, añadieron las mismas fuentes consultadas ante los principales medios de comunicación que están cubriendo el juicio.