
El consejero de Sanidad de la Junta de Castilla y León, Alejandro Vázquez, ha señalado este viernes que, si bien la «transmisibilidad» del coronavirus en la comunidad es «muy alta», está disminuyendo «la velocidad de crecimiento» de la incidencia, lo que da idea de que «es posible, con la precaución debida, que dentro de poco podamos alcanzar una situación de pico».
A preguntas de los periodistas antes de participar en un desayuno informativo organizado por Executive Forum, con la colaboración de las farmacéuticas Pfizer y Abbot, el consejero ha reconocido que, aunque se ha producido un «aumento» de lo ingresos hospitalarios ordinarios y «muchos de ellos» son por covid, «otra buena parte» es de personas que están «ingresados por otras cosas y que están con covid».
«Afortunadamente, la situación de nuestras UCI todavía no es una situación alarmante», ha añadido, antes de precisar que, en este caso, hay «muchos más pacientes que están con covid que los que han ingresado por el covid como causa inicial».
Vázquez ha llamado a la «precaución» y ha hecho un llamamiento a la responsabilidad en el uso de la mascarilla, «sobre todo cuando las circunstancias personales de cada uno y de los convivientes así lo aconsejan».
Cuestionado sobre la falta de profesionales este verano debido a las bajas por covid y los periodos de vacaciones, el consejero ha opinado que «hay que intentar congraciar los derechos de los trabajadores a las vacaciones, que bien se lo han ganado», con la indisposición de los profesionales por los contagios por la pandemia.
«Es posible que tengamos que readaptar la asistencia en algunos hospitales y en algunos centros de salud, como ya nos ha tocado hacer, y hacer plan de contingencia», ha señalado el consejero, quien ha manifestado la intención de la Junta de «mantener todo lo posible los periodos de descanso de los profesionales»: «Porque si no, realmente, aparte de por el covid, vamos a tener problemas por falta de descanso», ha comentado.