Agentes de la Policía Municipal de Laguna de Duero y de la Guardia Civil continúan la búsqueda por tierra y por aire, mediante un helicóptero y drones, del último de los diez novillos bravos que este martes se han escapado del matadero en que debían ser sacrificados. Los astados se han escapado del matadero en que debían ser sacrificados tras romper el muelle de seguridad de una de las puertas que les cercaba, tras participar días pasados en algunos de los festejos taurinos populares que se celebran en la provincia durante la primera semana de septiembre.