Nadal vuelve a lo más alto

El balear se impone a Federer (6-4 y 7-6 (5)) y suma su tercer torneo sobre tierra batida del año

El español Rafa Nadal venció ayer al suizo Roger Federer, defensor del título, por 6-4 y 7-6 (5) en la final del torneo de Madrid para lograr el tercer título esta temporada y ser el primer jugador de la historia que gana el mismo año en Montecarlo, Roma y Madrid, los tres grandes sobre tierra batida antes de Roland Garros.

El balear, además, superó al estadounidense Andre Agassi en el número de Masters 1.000 ganados, ahora ya con 18 para el de Manacor. El español, que ya se llevó este torneo en 2005 al vencer al croata Ivan Ljubicic y suma 39 títulos en su carrera, aparecerá hoy como ‘número dos’ del mundo, y se presentará en París imbatido en tierra esta temporada con 15 victorias, y solo dos sets perdidos, uno contra el letón Gulbis en Roma, y otro ante Nicolás Almagro, en Madrid.

Nadal necesitó dos horas y 10 minutos para devolver la moneda a Federer, su verdugo en la final del pasado año (6-4 y 6-4). Ante la Reina Sofía y la Infanta Elena, el manacorí logró la decimocuarta victoria sobre el helvético en 21 encuentros (10-2 sobre tierra).

«Nadie me había ganado en este estadio, pero Rafa está jugando increíble esta temporada de tierra», dijo el suizo con el trofeo de subcampeón en sus manos. «Estoy contento con mi juego sobre tierra batida», añadió el ganador del Abierto de Australia, quien pidió perdón al público que le ha apoyado siempre en sus partidos, por no dirigirse a ellos en español.

«Felicitaciones por esta sesión, por tu triunfo en Australia y porque tu carrera es increíble», respondió Nadal. «Ganar en Madrid otra vez es muy bonito, la experiencia de 2005 fue inolvidable, pero ahora triunfar aquí, con todo esto lleno es increíble», añadió.

El éxito en la Caja Mágica significa un salto cualitativo para el insular, que entrará en Roland Garros con esa vitola de invencible en tierra que lució en años anteriores. Ahora, con 28 títulos sobre arcilla, empatado con el checo Ivan Lendl y el rumano Ilie Nastase, y a dos del sueco Bjorn Borg, y del español Manuel Orantes (el argentino Guillermo Vilas ganó 45), el zurdo balear preparará de nuevo el asalto a la capital francesa.

Su virtud fue mantener la estrategia desde el principio al fin, adecuar su magnífico revés cruzado a las embestidas del suizo, y aprovechar cualquier resquicio del servicio del ‘número uno’, su mejor arma en Madrid por la altitud, con el que consiguió nueve directos.

Un error de Federer fue precisamente el que dio el triunfo a Nadal en el último punto. El resto del español en el desempate, en la segunda bola de partido, botó mal, y el helvético no acertó a conectar su derecha a mitad de la pista, con todo a su favor.

El suizo exhibió un exquisito e inteligente juego, con delicadas dejadas, incluso al resto, para atraer a la red a Nadal, que navegaba en el fondo como a él le gusta. Lo consiguió varias veces pero casi siempre los golpes desde la línea de saque se iban para el lado del español.

El duelo fue muy ajustado, pues el suizo acabó con 33 errores no forzados, mientras que Nadal cometió 27. Siete roturas de servicio, con cuatro forzadas del español le dieron el triunfo. Pero sin duda donde Rafa Nadal ganó el partido fue en el desempate, en el que estuvo abajo 2-4. No bajó los brazos, ganó los cuatro puntos siguientes y ahí desmoralizó a Roger Federer.