Nadal suda para cerrar su aplazado estreno parisino

El balear derriba la resistencia de Simone Bolelli, que llegó a contar con cuatro bolas de set, y se cita con Guido Pella en segunda ronda

Simone Bolelli felicita a Rafa Nadal después de caer ante el tenista manacorí en primera ronda de Roland Garros.
Simone Bolelli felicita a Rafa Nadal después de caer ante el tenista manacorí en primera ronda de Roland Garros. / EFE

Rafa Nadal se metió sin excesivos apuros en la segunda ronda de Roland Garros después de no alargar demasiado su debut ante el italiano Simone Bolelli, aplazado el lunes por la lluvia y que cerró con trabajo en tres sets por 6-4, 6-3, 7-6[9].

De este modo, el actual campeón, que ahora se medirá al argentino Guido Pella en busca de la tercera ronda, terminó con la resistencia ofrecida desde el lunes por el italiano, que continuó plantando la batalla que había iniciado antes de la suspensión del estreno del diez veces ganador en París, interrumpido por culpa de la climatología. Después de haber tenido buenas opciones el día anterior, en esta ocasión el jugador de Bolonia las tuvo incluso mejores, desperdiciando cuatro bolas de set en el tercero.

El número uno del mundo había impuesto en la Philippe-Chatrier su experiencia y mayor regularidad para poder ganar los dos primeros sets, eso sí con trabajo. Así, el primero se lo había adjudicado con un ‘break' con 5-4 a su favor, y el segundo tras levantar una desventaja de 3-1 con cinco juegos seguidos.

Del 0-3 al 3-3

De todos modos, Nadal afrontaba la vuelta a la pista en un guion similar, con un peligroso 3-0 en contra, pero no se encontró con un jugador tan inspirado en este nuevo comienzo. El número uno del mundo salió decidido a finiquitar este trabajado debut y rápidamente recuperó ese ‘break' en contra para igualar el partido ante un rival que no encontraba la frescura en su que había ofrecido en la víspera.

Pero Bolelli acertó a recuperarla para amenazar con más tenis para los espectadores. El italiano empezó a recuperar su poderoso ‘drive' del lunes, bien acompañado por un revés a una mano cruzada para ganar su primer juego y ponerse con un amenazante 0-40 en el siguiente, que Nadal supo salvar, al igual que una cuarta bola de rotura, para mantener la igualdad.

El de Bolonia no se rindió y aguantó hasta el ‘tie-break'. Ahí, se creció y llegó a gozar de cuatro bolas de set, tres con una ventaja de 6/3 en el marcador, pero el campeón tiró de su habitual carácter y volvió a remontar para poner fin al suspense.