El británico Mark Cavendish (Columbia) se adjudicó al sprint la quinta etapa del Tour de Francia, entre Epernay y Montargis, sobre 187,5 kilómetros, en una nueva jornada de distensión para un pelotón que continúa liderado un día más por el suizo Fabian Cancellara (Saxo Bank), virtual jersey amarillo de la carrera.
El velocista de la Isla de Man estrenó su catálogo de triunfos al imponerse con facilidad en la línea de meta al resto de favoritos en las llegadas masivas, en un final en el que el alemán Gerald Ciolek (Milram) y el noruego Edvald Boasson Hagen (Team Sky) concluyeron en segundo y tercer lugar, respectivamente.
Con esta victoria, el gran dominador en las ‘volatas’ del año pasado, y que aúna un total de 11 en su palmarés, sumó cuatro en 2008 y seis en 2009, en la ronda gala, lo que le devuelve a la posición de gran dominador en este tipo de especialidad.
Y es que esta quinta etapa de la ‘Grande Boucle’ resultaba propicia para que los velocistas volvieran a acaparar la atención en la pugna por el triunfo. El itinerario por la campiña francesa apenas presentaba dificultades, salvo dos picos testimoniales de cuarta categoría, ambos propicios para los intentos de fuga.
En concreto, fue en este comienzo de toboganes donde saltaron del pelotón tres inquietos, el belga Jurgen Van De Walle (Quick Step), el galo Julien El Fares (Cofidis) y el español José Iván Gutiérrez (Caisse d’Epargne), siendo este último el mejor situado en la general, a tres minutos y 24 segundos de Cancellara.
Tras el paso por la Côte de Mécringes, el terceto de escapados alcanzó su máxima ventaja, que llegó a rondar los 11 minutos con respecto al grupo. Por ello, las maniobras de los equipos con intereses por el triunfo no se hicieron esperar, rompiéndose el desahogo inaugural y reduciéndose los tiempos con el grupo cabecero.
Fin a la fuga
Así, tras el paso por la bandera de los últimos seis kilómetros, la escapada fue absorbida, aunque Gutiérrez, campeón de España en ruta, volvió a imponer su poderío físico buscando la sorpresa desde lejos y apretó los esfuerzos de los gregarios del Garmin y del Lampre.
Finalmente, los lanzadores de ambas disciplinas fulminaron este intento y batallaron por la mejor posición para abordar los últimos 500 metros en favor de sus respectivos líderes, el estadounidense Tayler Farrar o el italiano Alessandro Petacchi. No obstante, fue Cavendish quien recuperó su golpe de pedal habitual y el que, sin ayuda de sus lugartenientes, enfiló el libre carril de la izquierda para sorprender en la línea de meta.
De este modo, la caravana del Tour de Francia deberá abordar hoy la ruta más larga de la presente edición, en una sexta jornada que ligará las ciudades de Montargis y Gueugnon, sobre 227,5 kilómetros, y en la que el fuerte calor y las cuatro tachuelas de cuarta categoría pueden incomodar a los equipos con intereses en una nueva llegada masiva.
