Una jinete de cine

La estudiante de Arquitectura en IE University Mar Morris es una apasionada del mundo del caballo y se prepara para ser especialista en la gran pantalla.

“Triana” era una yegua asustadiza. La habían traído porque no servía para el rejoneo. Estaba traumatizada y se mostraba rebelde al trato humano. Ella se acercó a las cuadras donde estaba “Triana” recelosa en una esquina oscura. Lenta, pero segura, Mar Morris Viaji, acostumbrada desde los cinco años al contacto con caballos, tocó la testuz de la yegua, acarició con sus dedos su bello copete, su frente, su hermosa quijada… Los ojos del animal, tan nobles, se iluminaron suavemente como una vela y “Triana”, pese a su carácter agresivo, recuperó en ese instante la confianza perdida en el ser humano. Había conexión, un respeto mutuo entre jinete y caballo y, sobre todo, surgió una complicidad que aún perdura.

Mar Morris, estudiante de Arquitectura en , confiesa con una sonrisa superlativa que hoy día “Triana” es su yegua favorita. Con ella ha participado en varias competiciones nacionales y ha llegado a ser la cuarta mejor de España en “Pole Bending”, competición que se basa en la medición del tiempo que caballo y jinete tardan en realizar un recorrido serpenteado alrededor de seis palos o bastones enclavados en el suelo.

La vida de esta joven canaria de 22 años que estudia Arquitectura en Segovia gira en buena parte alrededor del mundo del caballo, un animal que despertó en ella una gran fascinación desde muy temprana edad. Sus padres, conscientes de esa irrefrenable atracción, quisieron que Mar Morris recibiera clases de equitación desde niña. No lo pudieron hacer mejor: hoy, la joven canaria es una solvente entrenadora de caballos de competición.

Tras unos años de formación, Mar Morris se inclinó finalmente por la doma Western, un estilo de montar a caballo que tiene su origen en los ganaderos americanos. Es una mezcla de estilos pensada para satisfacer las necesidades de trabajo de los vaqueros del oeste americano. Desde hace unos años, Mar Morris es una experta en este tipo de monta, y ha practicado varias de sus modalidades, como el Barrel Racing, el Cow Horse o el citado Pole Bending. La yegua “Triana” ya no se tiene que enfrentar a los toros, sino al cronómetro inexorable de los jueces y a unos incómodos obstáculos, y parece que le va bien.

Actualmente, Mar Morris se está formando en la doma de los caballos actores o especialistas. “Llevo dos años entrenando caballos para el cine, para que sean capaces de ejecutar la acción que el guion precise en cada momento, bien para rodar una escena de guerra, o una justa medieval, por ejemplo”, afirma la joven canaria, que añade que “entrenar un caballo para rodar una escena supone mucho trabajo; intento acostumbrar al animal a que responda al jinete cuando este tire con un arco, se ponga de pie encima suyo; también que el caballo haga giros o voltee”.

Recientemente, Mar Morris ha montado y entrenado con caballos que han aparecido en varias series de éxito, como en “La que se avecina”, y en diversos anuncios de televisión. “Me gustaría ser especialista de cine, pero desgraciadamente pocas mujeres aparecen montando a caballo en una escena de guerra, la mayoría de los especialistas son chicos”, asegura con cierta resignación.

Futura arquitecta Cada cierto tiempo, Mar Morris baja a Madrid para seguir entrenando y para no perder el contacto con los caballos. En Segovia, cursa quinto año de Arquitectura, una disciplina vocacional. Vive en el casco histórico de la ciudad, donde se encuentra muy a gusto porque “la vida aquí en Segovia es muy fácil”. Antes de llegar a IE University, Mar Morris tuvo la posibilidad de estudiar en las mejores universidades de Londres, pero finalmente se decantó por hacer Arquitectura en IE debido a “su completo programa de prácticas en el extranjero”. Así, Mar Morris ha podido realizar prácticas profesionales en despachos tan prestigiosos como el de la arquitecta y diseñadora de origen checo Eva Jiricna en Londres. También, ha sido alumna de intercambio en la Universidad de Tecnología de Sídney (Australia).

“No me veo como arquitecta asalariada trabajando en un estudio, sino como una emprendedora de aborde proyectos propios que aúnen mi formación profesional con mis aficiones deportivas”, subraya Mar Morris. Entre sus hobbies, la estudiante de IE University pone el acento en el surf, otra de sus auténticas pasiones irrefrenables. Ella posee el título de entrenador nacional de surf y, siempre que puede, viaja hasta Loredo (Cantabria) para practicar y dar clase de esta disciplina deportiva.

¿Cuál sería tu gran proyecto de futuro?, le pregunto. Mar Morris no duda en responderme: “Me gustaría crear mi propio negocio. Serían unas instalaciones ubicadas entre el mar y la montaña, diseñadas y proyectadas con mi visión de arquitecta, donde además de poder hospedarte con tu caballo puedas practicar y aprender otros deportes como, por ejemplo, el surf”, afirma.

El año que viene, Mar Morris dedicará muchas horas al estudio. A partir de enero preparará con intensidad su proyecto fin de carrera de Arquitectura. A mediados de julio, la joven canaria tiene previsto graduarse. Mientras que el tiempo se lo permita, se trasladará a Madrid para entrenar con caballos, y viajará al norte de España, para seguir enseñando y practicando surf.

La historia de Mar Morris es la historia de una joven que consigue todo lo que se propone. Su receta: poner pasión en lo que hace. “Triana” ya no es esa yegua mal domada y esquiva porque encontró en Mar Morris a la entrenadora perfecta, a una mujer amante de verdad de los caballos, unos de los animales más hermosos, nobles y apasionantes que existen.