Imagen de dos de los nuevos autobuses urbanos de Segovia circulando por la ciudad. / Kamarero

Han pasado 15 días desde que el candidato del PP a la Alcaldía de Segovia, Pablo Pérez, pusiera en marcha el correo para recibir las quejas y opiniones sobre el público y estas no han cesado de llegar. “Los segovianos son los perjudicados por el electoralismo de Clara Luquero y su falta de interés en la puesta en marcha del nuevo contrato que, no olvidemos, debería haberse renovado hace tres años”, recuerda Pérez.

Las quejas recibidas se centran fundamentalmente en el cambio de los horarios, en especial en las líneas 4, 5, 7, 8 y 9, por las modificaciones que han hecho que no se llegue a tiempo a trabajar o a los centros escolares, entre otras cosas. “Si haces un contrato nuevo lo normal es que sea para ofrecer un mejor servicio y que responda a las necesidades de la ciudad y de sus vecinos y no para que vaya a peor. Es de sentido común”, señala Pablo Pérez.

A los horarios se unen también quejas en las modificaciones de algunos de los trayectos, el deficiente funcionamiento de las máquinas para recargar las tarjetas o la limpieza y el mantenimiento de las marquesinas. “Qué menos que para comenzar un nuevo servicio que tenerlo todo limpio y arreglado y ni siquiera han sido capaces de exigir esto cuando viene recogido en el contrato. El seguimiento es fundamental en cualquier contrato así como exigir su cumplimiento”, se defiende el candidato popular.

Además, se han recibido varias quejas en relación a la ubicación de los aseos, ya que algunos están en las aceras, o en el caso de la línea del Puente de Hierro, al comienzo de la Vía Verde, lo que, para el PP, pone de manifiesto la falta de supervisión por parte del gobierno de Clara Luquero. “No parece muy lógico”, señala el candidato popular, “que un día esté la alcaldesa dando un paseo por esta Vía para potenciarla y haya permitido la colocación de un aseo justo al comienzo de la misma”.

En vez de reconocer los errores cometidos, según Pablo Pérez, la alcaldesa habla de “ajustes lógicos», cuando lo que tenía que haber hecho el equipo de gobierno socialista era haber estado pendiente tanto de que el contrato respondiera a las necesidades de la ciudad como de que todo estuviera listo en el momento de poner en marcha los nuevos autobuses. Sin embargo, en su opinión, han actuado deprisa pensando más en las elecciones que en comprobar cómo se iba a prestar el servicio. “ El transporte público es uno de los contratos más importantes para un Ayuntamiento tanto a nivel social como económico, como para no tener que estar corrigiendo cosas desde el primer momento. No se puede actuar de forma chapucera”, señala el candidato de los populares.