Muere Moro

El artista José María García Moro, madrileño de nacimiento aunque segoviano de adopción, ya que fijó su residencia en Segovia hace décadas, ha fallecido hoy en su residencia de la capital, a los 78 años de edad.

Moro, como le gustaba que le llamasen, había mostrado un estado de salud bastante deteriorado en sus últimas apariciones públicas, y hoy el que fuera pionero de las intervenciones escultóricas en espacios urbanos se despedía para siempre.

Los restos mortales de Moro permanecen en el tanatorio San Juan de la Cruz de la capital, donde permanece abierta la capilla ardiente. El funeral se celebrará el lunes, a las diez y media, en la iglesia de la Santísima Trinidad. El cadáver recibirá sepultura posteriormente en el cementerio del Santo Ángel de la Guarda.

Nacido en Madrid en 1933, el trabajo más característico y más reconocido de Moro le llevó a ir ganando las plazas y las calles públicas para la práctica del arte y la intervención del espectador, con montajes que parten de un solo color, una base cromática que cubre el piso, hasta pasar a la fiesta y el caos, cuando se van incorporando formas escultóricas y objetos que, finalmente, terminan esparcidos por la ciudad.