El nombramiento de policías y bomberos alivia parcialmente las mermadas plantillas de estos servicios municipales

La concejala de Personal, Marisa Delgado, confía en que la presión de los municipios para eliminar la normativa de tasa de reposición devuelva autonomía a los ayuntamientos

Los recientes nombramientos de tres agentes de la Policía Local y de seis bomberos-conductores del Servicio de Extinción de Incendios alivia parcialmente las mermadas plantillas de estos cuerpos del Ayuntamiento esenciales para el mantenimiento de la seguridad ciudadana, la seguridad vial y protección civil, entre otros aspectos.

La alcaldesa, Clara Luquero, nombró el 31 de enero a través de un decreto a uno de los tres agentes municipales como policía en prácticas, lo que le obliga a realizar un curso específico de seis meses en la Academia de Policía de Ávila, mientras los otros dos, que han superado asimismo las pruebas de selección de la convocatoria pública realizada el año pasado con la mejor puntuación, ya han realizado esa formación con anterioridad y su adaptación será más corta.

En cuanto al Servicio de Extinción de Incendios, el 2 de febrero, a través de otro decreto fueron nombrados los seis bomberos conductores propuestos por el tribunal calificador en el proceso selectivo correspondiente para cubrir plazas vacantes. En este caso permanecen como funcionarios en prácticas desde el pasado día 6 y hasta el 20 de este mismo mes, en el parque municipal de bomberos, donde siguen un curso de formación básica.

Tanto Luquero, como la concejala de Personal, Marisa Delgado, han señalado que con estos nombramientos no se cubre el total de vacantes existentes en ambos cuerpos, pero las convocatorias de oferta pública de empleo realizadas el año pasado, dentro de las posibilidades que permite la normativa, han permitido hacer frente casi de urgencia a una situación que empezaba a ser preocupante.

En la actualidad, según Delgado, de una plantilla de ochenta agentes de Policía Local, todavía están vacantes cuatro plazas, a las que se suma una entre los once oficiales de este cuerpo municipal. En el caso de los bomberos, la plantilla completa suma 32 —sin contar jefes y oficiales— y restan por cubrir seis plazas que pronto serán siete, ya que está en marcha un proceso de promoción interna para una plaza de cabo.

Delgado confía en que la presión que ejercen desde municipios de toda España lleve al Gobierno central a eliminar la tasa de reposición, que en el caso de Policía Local y bomberos es del 50% para las vacantes de cada año, mientras el resto de la plantilla del Ayuntamiento únicamente puede reponerse en un 10%.

Aluvión de aspirantes a empleados municipales

Hasta el momento, la oferta de empleo público del Ayuntamiento únicamente tiene en marcha un proceso de selección, de promoción interna, para una plaza de cabo-conductor, a la que se ha presentado un solo aspirante. Muy diferente ha sido la respuesta en los dos procesos convocados el año pasado, ya que el número de aspirantes a las tres plazas de agentes de la policía municipal fue de 93, mientras que para las seis plazas de bomberos la cifra superó el centenar.

La oferta para formar parte de las bolsas de empleo municipales también ha recibido decenas de solicitudes: 148 para una plaza de ayudante de mantenimiento de jardines, 108 para trabajador/a social, 69 para técnico en educación y 49 para psicólogo. En cuanto a interinos, hay 32 aspirantes a coordinador de la Casa de la Lectura.