CSI-CSIF ha alcanzado una destacada representación en administraciones públicas

Los sindicatos minoritarios y profesionales han restado delegados a los de clase en los últimos procesos electorales.

El presidente del comité ejecutivo de CSI-CSIF en Segovia, José Isern, no ocultaba ayer su satisfacción por los resultado de esta organización en las elecciones sindicales. Sostiene que en la función pública el 80% de los trabajadores han votado a sus representantes.

En este sentido, calcula que CSI-CSIF ha experimentado una subida de entre el 26% y el 27% en número de delegados, a falta del resultado de las elecciones sindicales convocadas para el próximo día 23 en los lugares de trabajo de la Junta de Castilla y León, a excepción de los docentes.

No hay que olvidar que la Junta es la principal empleadora de la provincia, con más de 4.000 trabajadores convocados en la citada jornada electoral.

Isern informa de que, por ejemplo, en la Administración de Justicia esta organización ha conseguido seis de los nueve delegados y en todos los procesos en los que ha participado ha subido en número de votos, convirtiéndose en “el referente dentro de la función pública”.

Entre los motivos que el presidente provincial de CSI-CSIF señala para explicar este destacado crecimiento del sindicato, se encuentra “la actitud hipócrita de UGT y CCOO, que pactaron con el Gobierno de Zapatero, cuando todavía era vicepresidenta María Teresa Fernández de la Vega, un acuerdo que luego se borró con un decretazo”.

Así mismo, añade que los dos sindicatos mayoritarios se sumaron a las movilizaciones contra este decreto “a última hora y de forma testimonial”, sumándose a una huelga en junio de 2010 que había convocado unilateralmente CSI-CSIF.

En su opinión, tanto UGT como CCOO “tienen sus intereses en el sector privado y los empleados públicos se han dado cuenta de que no les representan”.

Reconoce, sin embargo, que en el momento actual los delegados de CSI-CSIF “no lo van a tener fácil”.

“Sabemos que vamos a tener que negociar para minimizar los efectos negativos de la reforma , pero hay que admitir que habrá que asumir algunas cuestiones”, añade este representante sindical quien, por otro lado, dice que “los políticos son los primeros que cuando la situación económica no va bien ponen lo público a los pies de los caballos”.

Los resultados de las últimas elecciones sindicales indican también que otros sindicatos minoritarios, principalmente los de carácter profesional (en la Sanidad, la Educación, etc.) siguen ganando espacio a UGT y CCOO. Si a 31 de diciembre de 2007 ambos sindicatos mayoritarios sumaban en Segovia más de 1.040 delegados, a finales de 2011 la cifra había bajado ya del millar.