Las más de cinco décadas de la empresa segoviana Octaviano Palomo S. A., una sociedad familiar que nació en los años cincuenta de la mano de un empresario de Abades de la que toma el nombre, es una historia de éxito, con un punto de inflexión a partir del año 1986, cuando España entra en la entonces Comunidad Económica Europea (hoy Unión Europea) e inicia un proceso de internacionalización que ha posicionado a esta firma comercial en el segmento internacional del mercado de cereales, con ramas en la producción, la logística, la innovación, etc.
El verano es la época del año en el que la actividad de la empresa segoviana Octaviano Palomo es más intensa. La cosecha de cereal, ya que su principal actividad está ligada a esta producción agrícola, es la responsable. Cuando Pedro Palomo, consejero delegado, abrió las puertas de la sede de la empresa, en el centro de la ciudad de Segovia, a EL ADELANTADO, la campaña estaba en pleno apogeo. “Los mercados de cereales tienen una alta dependencia de las cosechas internacionales, y un tema importante es que hay una demanda creciente debido al aumento de población en países emergentes como China o India y al uso industrial de cereales para fabricación de almidones y biocombustibles”, comenta.
Octaviano Palomo es una empresa con una doble actividad: En el mercado doméstico, por un lado, muy relacionada con la actividad comercial internacional. Explica Pedro Palomo que “aunque la mayoría de la gente piensa lo contrario, España es un país deficitario en cereales. El granero de Europa está en Ucrania, Rumanía, etc. Es cierto que Castilla y León tiene una gran superficie de cultivo de cereal pero los rendimientos son inferiores a los de otros países debido a la pluviometría, la calidad del suelo y la altitud”.
En ese contexto, esta sociedad segoviana dedicada a la comercialización de cereales tiene una vocación de servicio, a clientes y proveedores, señala Palomo, quien indica que hace años, cuando se incorporó a la empresa, “algunos clientes nos cuestionaban que no estuviéramos en Madrid o Barcelona por las comunicaciones. Hoy en día ya no es así, porque tanto las comunicaciones terrestres, como la tecnología, el acceso a internet, han favorecido de forma importante las relaciones comerciales. Se puede ser una empresa internacional desde segovia”.
De hecho, Octaviano Palomo implantó un sistema de información que permite conocer en tiempo real todas las cargas de cereales que maneja en cualquier punto del planeta, lo que les permite ser muy competitivos. “Estamos muy orgullosos de estar en Segovia y de ser segovianos, ¿donde mejor que en nuestra tierra para poder desarrollar esta actividad?”, afirma el consejero delegado.
En tiempos de crisis la empresa se ha mantenido en las primeras posiciones del ranking provincial en cuanto a facturación. “Estamos intentando ser más competitivos, somos conscientes de que solo si podemos aportar valor en la cadena tenemos futuro y, sin duda, la internacionalización está siendo clave de cara al futuro de la sociedad”, apunta Pedro Palomo. A eso, se ha añadido un ajuste de gastos adecuado a la estructura empresarial y la externalización de algunos capítulos que podían ser gravosos.
Octaviano Palomo ha elaborado un plan estratégico para los próximos años en los que los responsables apuestan por ser más competitivos todavía, abordando nuevos mercados e incidiendo en tres aspectos fundamentales: Servicio a los clientes, calidad y precios competitivos.
Con esos mimbres,desde esta empresa familiar ven el futuro “con optimismo moderado, porque estamos en el inicio de la cadena alimenticia; este sector, esta empresa, solo tienen futuro si sabemos adaptarnos a las circunstancias y al momento económico que estamos viviendo”, señala Pedro Palomo.
El hecho de ser una empresa familiar es “quizá el activo más importante”, añade. Lo razona de la siguiente manera: Confluyen en la empresa accionistas propietarios, gestores y familia, tres ingredientes que bien administrados son motor de crecimiento y de potenciación de valores de la empresa y el emprendedurismo.
Por otro lado, Pedro Palomo indica que, a nivel general, las empresas relacionadas con la agricultura, cada vez están más sometidas a controles legislativos, de calidad, de medio ambiente… “En Octaviano Palomo estamos a favor de todo ello pero también nos gustaría que se facilitara la actividad empresarial, económica. Nos gustaría tener un mercado único, que funcione la anunciada ley de garantías de un mercado único en España y se armonicen las legislaciones que afectan a la producción agroalimentaria, ahora dispares según la comunidad autónoma”.
Pedro Palomo es, además, presidente de la Federación Empresarial Segoviana y de la Cámara de Comercio e Industria de Segovia, cargos que compatibiliza con su labor en Octaviano Palomo con el apoyo familiar
—robándola tiempo en fines de semana, por ejemplo— y porque la época de más actividad en la empresa coincide con la de menor ritmo institucional en cuanto a la representatividad de los empresarios de la provincia.