Medio centenar de personas se movilizó contra la violencia machista

La marcha organizada por Izquierda Unida recorrió las principales calles de la localidad. También se organizaron diversas actividades para conmemorar este día de lucha.

La Asamblea Comarcal de Izquierda Unida organizó, como estaba previsto, una marcha para condenar la lacra social de la violencia machista. Desde la Plaza Mayor, alrededor de medio centenar de personas inició un recorrido por algunas calles del barrio de San Gil para llegar después a las más céntricas y terminar en la Plaza de la Huerta Herrera. Cuatro jóvenes portaron una pancarta que encabezó la manifestación y cuyo lema era: “Violencia de género, tolerancia cero”.

En el punto final de la manifestación se procedió a la lectura de poemas y textos relacionados con el tema. Concretamente, uno trató el caso de una mujer que ha protagonizado un documental y que relata la crudeza de su experiencia; abandonada por unos familiares que le recriminaban que su caso era una exageración y con dos hijas jóvenes, esta mujer no recibió ayuda institucional. Tan solo cuando el documental salió a la luz, altos cargos se pusieron en contacto con ella para ofrecerle toda la ayuda necesaria. Este solo fue uno de los múltiples ejemplos que se expusieron y con los que todos los presentes se solidarizaron. Asimismo, algunas de las participantes en la marcha confeccionaron 45 flores de papel que se colocaron en las solapas, una por cada víctima de maltrato este año. “El papel simboliza su fragilidad y espero que cada año tengamos que hacer menos hasta no hacer ninguna”, comentó emocionada su creadora, Paula Pascual.

La celebración del día de la lucha contra la violencia de género trajo consigo varias actividades. En la sala cultural ‘Alfonsa de la Torre’ se proyectó un pequeño corto realizado por estudiantes universitarios, así como la película ‘En el tiempo de las mariposas’.

En el IES ‘Marqués de Lozoya’ también se sumaron a estas iniciativas y leyeron un manifiesto. El objetivo de éste fue “mostrar el total rechazo a este tipo de violencia y fomentar modelos alternativos de convivencia basados en la igualdad”. Una de las profesoras de plástica, Yolanda Moreno, que ya dejó patente el año pasado que hace reflexionar a sus alumnos, quiso decorar la entrada del centro con un montaje que simbolizó también el absoluto desprecio a la violencia machista. Alumnos y vecinos parecen cada vez más concienciados, pero las cifras nacionales demuestran que aún queda trabajo por hacer.