Las noches veraniegas comenzaron ayer su actividad musical; la propuesta municipal ‘Noches del Mudéjar’ comenzó con un concierto de Mayalde en el Patio de Armas del Castillo, y no pudo empezar de mejor manera. Un lleno casi absoluto en este concierto tan dinámico pone el listón alto a los siguientes, aunque la respuesta de los vecinos seguiro continuará en esta línea si la noche acompaña.

Desde las 22.00 horas, el grupo salmantino comenzó con su objetivo de cada concierto: la divulgación y popularización de los ritmos musicales tradicionales, ligados a las costumbres. Evocaron al público a las casas de los pueblos, la idiosincrasia de cada lugar, las noches veraniegas en torno a la mesa, la vida rural, con ese humor que Mayalde lleva por bandera allá donde se sube al escenario. Platos, cazuelas, botellas y todo tipo de objetos sirvieron para hacer música, y lograron además que el público se animará con cánticos, bailes, acertijos y diversión. Por un momento, abandonaron los móviles -como pidió Eusebio- para disfrutar de algo tan simple como la música tradicional con aires mudéjares, para dar sentido a la primera cita de esta iniciativa.