Las mujeres rurales volvieron a tener una cita en la sede nacional de la Federeación de la Mujer Rural, en Hontalbilla, en una jornada dedicada especialmente a la sensibilización y la cooperación. Desplazadas desde Zamora, Segovia, Valladolid y Salamanca, más de un centenar de mujeres pudieron conocer muy de cerca cuál es el papel que tiene la mujer rural en proyectos de desarrollo y cooperación realizados en zonas de Bolivia.
Se encargó de inaugurar esta jornada la presidenta de la Federación, Juana Borrego, que quiso compartir con las mujeres allí presentes su experiencia en Bolivia hace años. Acompañando en el escenario se encontraba Eva María Domínguez, jefe de servicio de Cooperación para el Desarrollo de la Junta, en lugar de José Manuel Herrero Mendoza, secretario general de la Consejería de Presidencia de la Junta de Castilla y León, que se encontraba fuera por compatibilidad de agenda. Domínguez explicó que los proyectos de cooperación entre Junta y Femur vienen de lejos, y además de realizarse en poblaciones necesitadas, llevan consigo otra parte de concienciación y sensibilización en el terreno rural autóctono. En dichas zonas necesitadas realizan fundamentalmente dos tipos de proyectos, uno de dotación de agua compaginado con emprendimiento económico, y otro con el empoderamiento de la mujer; ambos conceptos están muy vinculados a las bases de Femur y de la propia Junta. Concretamente, el proyecto financiado a la Federación, y con un importe de alrededor de 63.000 euros para infraestructura, es el de canalización de agua en países que no tienen acceso a agua potable; se trata de un punto de agua para una comunidad que facilite la vida, y que con aportación del gobierno local se ha hecho extensible a otras zonas. “Parece algo muy alejado a la realidad, pero afecta mucho a las mujeres, que son las que recogen diariamente el agua”, explicó. Aclaró también que cuando se ofrecen vías para conseguir agua, se evita un desplazamiento de más de siete kilómetros diarios, y se facilita el acceso de las mujeres a la educación o a otros planos laborales y de desarrollo económico. Por otro lado, las agresiones sexuales en estos recorridos son muy habituales, por lo que este proyecto pretende reconocer el derecho internacional a la disponibilidad de agua potable y combatir esta lacra. En Castilla y León se trabaja por dar a conocer estas realidades y sensibilizar a la población, buscando la corresponsabilidad y esa relación entre las mujeres del mundo.
Juana Borrego desveló que también se sigue trabajando en el tema de la agenda 20/30, sobre la que se ha hablado sobre todo de necesidades rurales y “estimulan a las mujeres de este entorno, que tantos servicios necesitamos, porque queremos vivir en los pueblos”. Asimismo, la presidenta comentó que se está trabajando en otro proyecto de cooperación para Bolivia, “porque vemos la necesidad que hay de tener agua”. Dependiendo de plazos y convocatorias, podría realizarse en este mismo año, aunque depende también de la concesión.
Por su parte, Elvira Velasco Morillo, vicepresidenta de Femur y patrona de la Fundación Humanismo y Democracia, habló de un proyecto que se está realizando en conjunto y que también tiene parte de cooperación y sensibilización. En concreto, este proyeecto es de seguridad alimentaria en el sur de Bolivia, una de las zonas asoladas por la desnutrición. Se está ayudando a crear cultivos de alto nivel energético, y contempla desde la formación a la inclusión de las mujeres, hasta la comercialización. Hay 50.000 personas “muy aisladas” y gracias a convocatorias como las de la Junta de Castilla y León, se puede seguir apostando por estos proyectos y que las mujeres Femur sean conocedoras del esfuerzo.
EMPRESA SOLIDARIA Este diario estuvo presente a través de su directora, Teresa Herranz, respondiendo así a la calificación de El Adelantado de Segovia como empresa solidaria con Femur. En la provincia se lucha contra handycaps parecidos a los de algunos de estos países en los que se trabaja, como es la despoblación; se encuentran bastantes similitudes a una problemática latente contra la que se toman medidas a diario y por la que Femur también trabaja, aquí y allí.
Javier Gila, de la Asociación Ayuda, Intercambio y Desarrollo, y Francisco Javier de Rodrigo, presidente de la Asociación para la Erradicaicón de la pobreza en Bolivia, también participaron exponiendo las soluciones que se están aportando, fruto de un trabajo sólido y en común que busca hacer un mundo un poco más justo.